San Luis Potosí.- Durante tres días, la capital fue el escenario para el XVII Encuentro Nacional de Teatro, donde se realizaron cerca de 50 puestas en escena y más de 2 mil 500 actores que representaron obras de grandes autores como Moliere, Schiller, Miguel de Cervantes y Darío Fo, entre otros clásicos de la dramaturgia mundial y mexicana, ante un público de más de 20 mil personas, evento en el que Puebla y el Estado de México obtuvieron los primeros lugares en las categorías semiprofesional y amateur, respectivamente.
En el majestuoso Teatro de La Paz, al concluir el XVII Encuentro Nacional, organizado por el Movimiento Antorchista, su líder nacional, Aquiles Córdova Morán, afirmó que el teatro educa y transforma y hace que la gente piense, sienta y razone como los grandes dramaturgos que son unos genios que hacen trabajar la inteligencia y ése es su valor educativo.
En el acto de clausura, Córdova Morán destacó que el único requisito para hacer teatro, es que la obra tenga talento, genio y eduque al pueblo. “Si el teatro se hace bien y se pone cuidado e interés en la selección de lo que se presentará, y luego ya en el escenario se hace esfuerzo por conectarse con el público, producirá una mejor educación y una elevación espiritual del pueblo que asista a presenciar la obra”.
El arte bien seleccionado y ejecutado con verdadero conocimiento y maestría tendrá que conmover al público y “éste debe sentir que se ha transformado y que le han surgido en la mente nuevas ideas y nuevos sentimientos en su corazón; con un cerebro y corazón activados y más listos tendrá que pensar y sentir la vida de otro modo y tratará de comunicar a los demás lo que apreció, experimentó y vivió”, puntualizó.
Así, señaló que después de apreciar una gran puesta en escena, el efecto multiplicador del teatro dependerá del público, que se debe proponer hacer ese trabajo y compartir lo que ha sentido y cómo lo ha impactado; el espectador debe compartir lo que sintió y vivió; en este sentido remarcó que ese efecto multiplicador del teatro y de la cultura debe ayudar en la meta que Antorcha se ha propuesto: crecer y organizar por lo menos a 10 millones de mexicanos en menos de una década.
“Nosotros venimos pregonando y levantando la bandera de un teatro de calidad, educador y transformador; un teatro que haga que la gente piense, sienta y razone más hondamente el mensaje de los dramaturgos como genios que hacen trabajar la inteligencia, y en eso consiste el valor educativo del teatro; tenemos que pensar, trabajar y meditar con las obras de teatro”, puntualizó.
Ya en la inauguración del encuentro el líder social se había referido a que el teatro escrito por grandes dramaturgos como Shakespeare, Moliere, Goethe, entre otros, ayuda a pensar. “Cuando la obra es buena, es seguro que se refleja la vida y los problemas profundos y trascendentales del hombre y no los problemas más superficiales que plantea el teatro moderno. El teatro siembra inquietudes y da a conocer los problemas, y así cada hombre se hará una idea de la solución; basta con que el teatro siembre inquietud para educar a la gente y cree soluciones”.
Al acto de clausura acudieron integrantes de la Dirección Nacional antorchista, en la que destacaron los dirigentes, en San Luis Potosí, Lenin Campos Córdova; del Estado de México, Jesús Tolentino Román Bojórquez; de Michoacán, Omar Carreón Abud; el presidente de la Comisión Nacional Cultural de la organización, Juan Manuel Celis Aguirre; la dirigente en Hidalgo, Guadalupe Orona; de Oaxaca, Gabriel Hernández, los Doctores en Economía Brasil Acosta y Abel Pérez Zamorano y Edgardo Amilcar Lara; Homero Aguirre Enríquez, gestor y vocero nacional antorchista, así como los diputados federales Telésforo García Carreón y Maricela Serrano Hernández.
El programa cultural de clausura estuvo a cargo del grupo estatal de la organización, que interpreto canciones, poesía y bailables en homenaje al pueblo venezolano que en la actualidad está siendo atacado por el imperialismo.
Las compañías teatrales que representaron a Puebla y el Estado de México, se alzaron con los primeros lugares en el XVII Concurso Nacional de Teatro que se realizó este 21, 22 y 23 de octubre en la capital potosina.
En la categoría semiprofesional el primer lugar fue para Puebla con la obra “Guillermo Tell” de la Compañía Víctor Puebla; el segundo lugar en un empate para las obras “La persecución y asesinato de Jean-Paul Marat”, de la Compañía Humberto Vidal del Estado de México y “Las Criadas” que representó a Puebla; el tercer lugar también fue un empate entre las obras “La muerte accidental de un anarquista”, de la Ciudad de México y “El oso”, del estado de Chiapas. Hubo también mención honorífica para la obra “Tito Andrónico” que representó a San Luis Potosí y para la obra “Espartaco”, de Jalisco.
Además, Aquiles Celis Córdova de la puesta en escena “La muerte accidental de un anarquista” obtuvo el premio al mejor actor de reparto; y con el papel de Solange, Ovidio Celis Córdova en la obra “Las criadas”, logró el premio a la mejor actriz; el mejor actor secundario fue Israel Gómez, de Chiapas, en la obra “El oso”; la mejor actriz secundaria fue Justa Esteban Juárez, de la obra “La persecución y asesinato de Jean-Paul Marat”, del Estado de México. El premio a la mejor dirección fue para Amancio Orta, de la obra “Las criadas”, que presentó el estado de Puebla, y el de mejor escenografía se le asignó a la obra “Guillermo Tell”, de Puebla.
Mientras, en la categoría Amateur el primer lugar fue para la obra “Salomé” del Estado de México; en el segundo lugar hubo un empate entre Michoacán y Puebla con las obras: “Xayra” y “Los invasores”, respectivamente; y el tercer lugar lo ocupó “El avaro”, obra que representó a San Luis Potosí.
El mejor actor de reparto fue Yasér García, de Puebla, en la obra “Los invasores”, la mejor actriz de reparto fue Josabeth Menéndez, de la obra “Los perros”, de Elena Garro, representando al estado de Veracruz. El mejor actor secundario fue Luis Miguel López Alanís, del estado de Michoacán, participante en la obra “Xayra”; en el premio a mejor actriz secundaria hubo un empate entre Delmira Molina y Viviana Saldaña de las obras, “Entremeses Cervantinos” y “Las manos sucias”, de la CDMX y Estado de México, respectivamente. La mejor dirección fue para Xóchitl Quetzal, con “Sueño de una noche de verano”, presentada por la Ciudad de México, y la mejor escenografía fue para la obra “Los invasores”.
El concurso, que se desarrolló durante tres días en el Teatro de la Paz y el Instituto Potosino de Bellas Artes, resultó un éxito al reunir a más de 2 mil 500 actores. Además de tramoyistas, logística y personal de staff.
Con la edición número 17 de este encuentro teatral, Antorcha reafirma sus objetivos con los mexicanos para seguir impulsando y desarrollando la cultura y el arte entre el pueblo de México; para que este se eduque y pueda transformar la sociedad en una con más equidad y justicia para todos. Su próximo evento cultural nacional será en el mes de noviembre con el Concurso Nacional de Voces, en Pachuca, Hidalgo.
