Por: Manuel Aparicio
Un asunto por demás delicado, es que a un año de implementado en Puebla el Sistema Penal Acusatorio, no funcione. Tiene deficiencias de tal magnitud que muchos delincuentes evaden la acción de la justicia. Pero esto es consecuencia de que en la entidad, principalmente, no hay infraestructura, no se preparó a los jueces, ni a Ministerios Públicos y mucho menos a los propios litigantes.
Y así lo confirma José Guadalupe Sánchez, quien es miembro del Observatorio Laboral Ciudadano quien además asegura que: de todos los litigantes en Puebla, como el 10 por ciento sabe del nuevo sistema Penal Acusatorio. Las propias autoridades, asegura, no se han preparado porque no son sensibles para impulsar este tipo de cambios”. Lo cual, desde luego, es muy lamentable. Así es que se impone un nuevo análisis de este sistema en virtud de que la presunción de inocencia de los sospechosos y la falta de denuncias para castigar un delito, permitirían muchas veces la liberación de los culpables.
Ahora se entiende que con la inoperancia del Sistema Penal Acusatorio, el crimen en la ciudad de Puebla ha escalado niveles alarmantes; y mayo se constituye como el mes más violento en lo que va del año, pues de 85 homicidios dolosos denunciados, 45 de ellos fueron perpetrados con arma de fuego. “Las propias autoridades han reconocido que 2 mil presuntos delincuentes han sido liberados incluso en flagrancia, esto quiere decir que el nuevo sistema acusatorio adversarial debe ser revisado”.
Por otro lado, el director de la Facultad de Derecho de la Universidad Popular Autónoma de Puebla, Matías Rivero Marines, de manera coincidente señala que en la entidad se carece de una fiscalía que cumpla los parámetros y estándares que la población necesita, en consecuencia no es el Sistema Penal Acusatorio el que tiene el defecto sino la institución por no cumplir con la exigencia social y, precisó: “no se necesitan más obras de relumbrón sino que el presupuesto se aplique a medidas de contención”.