María Esther Beltrán Martínez Fotos: J. Carlos Santana
Andalucía, España.- Visitar una exposición donde vemos imágenes inéditas de Pablo Ruiz Picasso tomadas por el poeta y dramaturgo catalán Josep Palau i Fabre deja una experiencia visual única.
Durante la visita se ven documentos, fotografías y pinturas que revelan la amistad entre el poeta y el pintor. De Picasso sabes lo esencial y seguramente sobre Palau muchos no lo conozcan. Les informó que Josep Palau es poeta, escribió obras de teatro, narrativa breve y ensayos, género en el que destaca el trabajo elaborado sobre Picasso. Explica el curador de la exposición Víctor Fernández en el prólogo del catálogo ex profeso para la exposición Palau mira a Picasso que se presenta la Fundación Picasso Casa Natal.
“Palau se trasladó a París en diciembre de 1945, donde inició un exilio literario y humano que lo situó al margen de grupos y de corrientes. Desde que puso los pies en la capital francesa tuvo muy claro que su principal objetivo era poder conocer a Pablo Picasso y ¿quien sabe? Incluso poder convertirse en amigo suyo. No era un trabajo fácil, porque el pintor se había convertido ya por entonces en el artista vivo más influyente de su siglo, además de un símbolo de la Resistencia, tras haber sobrevivido al represivo yugo nazi en la Francia ocupada. El pintor no se dejaba ver en público y prefería que su pintura hablará por sí misma y por él. Picasso no se muestra en público, tampoco en los eventos más relevantes donde su obra sí está presente. Lo comprueba Palau i Fabre en persona al acudir a una exposición en la emblemática galería Louis Carré, con la secreta esperanza de coincidir con el padre de “Las señoritas de la calle Aviñón”. Sin embargo y como era de esperar el poeta catalán no tiene suerte: Picasso no ha acudido.
Fernández narra el camino que recorrió el poeta hasta estar frente al artista con el que tuvo química y le permitió que escribiera de él y le tomará fotografías, las cuales ahora se pueden ver en Málaga.
Entre lo más sorprendente es ver el cuadro Vistas del puerto de Málaga, considerada como la primera obra artística de Picasso. “El primer óleo que se conoce de Pablo pudo ser pintado hacia 1888: Vista del puerto de Málaga, versión de la copia que hizo su padre en 1887 del óleo original de Emilio Ocón y Rivas (fechado en 1878). Parece ser -según cuenta Maya Picasso – que lo pintó de memoria (el cuadro del padre estaba en el salón), a la luz de una pequeña vela, escondido debajo de la cama de su hermana Lola, que le había suministrado pintura rascada de la paleta de don José”, según se recoge en diferentes biografías sobre el artista.
Sobre las fotos que se exhiben son inéditas sobre Picasso durante su visita el 22 de abril de 1964, pero también sobre los lugares que el artista visitó o tuvo relación entre los que se encuentra: La Coruña, Barcelona, Madrid, Horta de Sant Joan o Gósol, así como en Francia, Italia y Holanda.
Entre los documentos que se muestran están las dedicatorias y retratos hechos por Picasso a Palau, así como las anotaciones manuscritas del malagueño, como la que hizo para certificar el primer cuadro que pintó siendo niño, la pintura antes mencionada.
Se puede ver un cenicero realizado por el artista además de los apuntes que hizo para el escritor de su estudio en el Bateau- Lavoir, el taller parisino donde nació el cubismo. Sin duda alguna Palu es reconocido como una de las principales autoridades en los estudios picassianos con una extensa bibliografía que es considerada indispensable para conocer a Picasso. Además se toma en cuenta que contó con el apoyo del mismo artista que lo ayudó proporcionándole numerosos datos y documentos sobre su vida y su obra.
Coincidiendo con el centenario del nacimiento del poeta se presenta está exposición en la que también se ven los trabajos que realizaron los artistas Antoni Tàpies, Luis Gordillo, Antoni Llena, Antoni Muntadas, Carlos Pazos, Perejaume y Joan Fontcuberta a partir de una fotografía tomada por el poeta al pintor malagueño.
