Para Germán Madrazo, desfilar con la bandera de México en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno en Pyeongchang, Corea, ha sido la mejor experiencia de su vida, y que sería como lograr una medalla.
Comentó que a pesar de no haber conseguido una presea, la sensación fue como si hubiera obtenido un metal. “Es lo más increíble que ha pasado en mi vida”, mencionó Madrazo, quien competirá en la modalidad de Cross Country.
Indicó que llega un momento que están en la zona de espera y los sentimientos se intensifican para después salir con la bandera. Lo que diga con palabras no expresa ni el cinco por ciento de los sentimientos. Se pone la piel chinita cuando vas caminando, es una cosa indescriptible”.
Señaló que pisar el Estadio de Pyeonchgchang superó sus expectativas de lo que imaginaba. “La sensación fue mucho más bonita de lo que me hubiera imaginado”.
En cuanto al uniforme de charro, dijo que el objetivo principal es identificar a los mexicanos. “Pretendo con este proyecto llegar a la gente de México, los invito a que crean en sus sueños, a que se arriesguen, a que se pueden hacer las cosas porque no hay imposibles”.
El deportista comentó que se vio obligado a salir del país por la inseguridad que vivió tras sufrir dos asaltos en Tamaulipas, por lo que tuvo que emigrar a Estados Unidos (McAllen) donde empezó una nueva vida. “Estos sentimientos quería trasmitirlos y plasmarlos en esta experiencia como abanderado, sentí que la mejor manera de hacerlo era que la gente de México pudiera identificarse”, concluyó.