Sus adversarios políticos, se cansarán de buscar una conducta ilegal o indebida de José Antonio Meade, pero jamás la encontrarán. Precisamente es lo que lo distingue de Ricardo Anaya, sobre quien pesan acusaciones y señalamientos muy graves, las cuales han sido formuladas, no sólo por opositores, sino por personas confesas en procesos judiciales e, incluso, por prominentes miembros de su propio partido.
Los ataques sin sustento contra José Antonio Meade son una acción desesperada del equipo de Ricardo Anaya, como consecuencia de ver al candidato de Todos Por México consolidado en segundo lugar y en trayectoria ascendente para disputar la victoria el 1 de julio.
Respecto a las falsas versiones de la participación del candidato de la coalición Todos por México en el convenio Etileno XXI, se reitera que éste se signó el 25 de febrero de 2010 y que Meade asumió el cargo de secretario de Energía el 7 de enero de 2011, ante esa evidencia sobran más declaraciones.
En el entendido de que el presidente del Consejo de PEMEX no firma contratos, por lo que no tuvo participación alguna en la firma del referido documento y como presidente del Consejo, Meade siempre buscó la transparencia de los contratos de PEMEX.