*3er error de Andrés Manuel y aún no inicia el sexenio
Por Luis Repper Jaramillo*
El mal es de origen
Se remonta a la mañana del domingo 16 de abril de 1989, en la residencia particular del Líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Carlos Jonguitud Barrios que encabezaba el movimiento Vanguardia Revolucionaria del Magisterio, mientras desayunaba, recibió la llamada telefónica de Andrés Massieu Berlanga, Secretario Particular del Presidente de México, Carlos Salinas de Gortari.
Al otro lado de la línea, el funcionario ordenó: “a las 12 del día lo recibirá en el despacho de Los Pinos, el señor Presidente. No llegue tarde”. No hubo explicación, menos tema de la reunión. Colgó
Puntual a la cita, pasó a la Sala Benito Juárez, del despacho presidencial.
Sólo una orden. “En este momento queda usted relevado de la representación sindical de los maestros del país. Hágalo saber en Asamblea Extraordinaria del CEN del SNTE”
No más de 15 minutos duró el encuentro. La disposición fue tajante.
¿La autonomía y soberanía sindical?… Bien gracias.
Jonguitud Barrios, a su pesar e indignado, hizo lo ordenado. Una semana después, el 24 de abril de 1989, en una Asamblea Extraordinaria del SNTE, fría, enconada, incomprensible, injerencista (del gobierno de CSG), la maestra chiapaneca, impecablemente vestida con ropa de marca, bolso carísimo, zapatos de diseñador, perfume francés, accesorios importados, con cara triunfalista, entró al auditorio del Sindicato en donde fue proclamada (por el dedo de Dios) Presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE… así, sin campaña, ni votos, ni acuerdos sindicales; ni por la gracia de los maestros del país.
¡¡Vamos!! Impuesta desde Los Pinos, por quien desde ese momento sería su padrino y socio político, Carlos Salinas de Gortari.
Bueno… Ahí empezó todo. Todo el poder, todos los excesos, toda la corrupción, toda la impunidad, todos los saqueos a las cuotas sindicales, a darse vida de reina, de diva, de poderosa lideresa… hasta que otro gobierno priista, el de Enrique Peña Nieto, exige su detención y juicio penal. Es capturada el 27 de febrero de 2013, en el Aeropuerto de Toluca, cuando descendía de su avión privado.
Es acusada por la PGR de dos delitos: delincuencia organizada y lavado de dinero.
Y había razones de sobra para juzgarla. Durante 24 años depredó dinero ajeno, obtenido (por ley) de las cuotas sindicales que quincenalmente le quitan a 1 millón 673 mil 623 miembros, entre maestros de grupo (los más), directivos, administrativos, de intendencia, comisionados al Sindicato, etc. más los “extras” que a lo largo de su reinado obtuvo del gobierno federal, de los presidentes Salinas, Zedillo, Calderón, Fox y parte de Peña, hasta que en febrero de 2013, éste, decide traicionarla, por razones políticas, partidistas y extra sindicales.
Elba Esther, pagó su traición a Jonguitud Barrios, sólo que ella purgó 5 años de cárcel, hasta que el dúo Peña Nieto/López Obrador pactaron dejarla en libertad. ¿Primera amnistía a un delincuente organizado, del sexenio de AMLO? porque los excesos y robo al magisterio decente obligaba a que la chiapaneca siguiera en prisión, por daño patrimonial y corrupción, lavado de dinero y por ende, delincuencia organizada. El sólo hecho de juntarse con “amigos” para maquinar qué hacer con dinero ajeno, ya es delito… ¿O no, PGR?
La Diva Elba Esther tiene un historial infame, solapada por los gobiernos priistas y panistas, quienes dieron dinero a manos llenas. En esta turbia relación las cuotas sindicales eran sólo para los caprichos personales, familiares y de su primer círculo, porque las verdaderas alforjas cargadas provenían del erario público, presto, puesto y dispuesto por los presidentes en turno.
Se sorprenderá de las cifras de dinero bueno (erario público) prostituido por ella, sus cómplices, autoridades hacendarias, laborales, judiciales, fiscales, partidistas, electorales omisas por donde fluía dinero y todos callaban, guardaban codelincuente silencio. Todo lo descrito más adelante sería suficiente para mantener en custodia carcelaria a la deshonrosa maestra que avergüenza a los verdaderos mentores, que por 8 mil 422 pesos mensuales desgastan en el aula garganta, pulmones, hígado, carácter, mente, voz y vida.
Pero Elba Esther nunca padeció los salarios de miseria por ejercer esta noble y maravillosa profesión. Al amparo de padrinos, amigos, políticos, intereses y conveniencias, desde 1989, ha malgastado en asuntos políticos el dinero de las cuotas sindicales para recibir favores, engrosar sus cuentas bancarias personales, de la parentela y allegados.
Uno de los grandes escándalos en que se metió fue en 2008, cuando bondadosamente, en plenitud de su reinado, obsequió a los Secretarios Generales del SNTE en todo el país 59 camionetas Hummers, con valor nominal de 500 mil pesos, que provocó un quebranto de 29 millones 500 mil pesos a las finanzas del sindicato. Cuando los medios de comunicación difundieron esto, ip so facto, la doña ordenó (simuló) a sus testaferros “rifar” los automóviles y el producto de esto destinarlo a la reparación de escuelas. Absolutamente falso; los dirigentes sindicales usufrutuaron el obsequio.
Pero los favores que Salinas de Gortari y el PRI le hicieron a partir de su ascensión al puesto sindical tenía que devolverlo en especie y en efectivo a ambos, por un lado, junto con Pemex, el SNTE se convirtió en “caja chica” del gobierno y del PRI para todas las campañas tri y sexenales. Para disfrazar ese apoyo, se compró… ¡perdón! fundó su propio partido político, Nueva Alianza (PANAL), que se convirtió a la vez en receptáculo de más millones de pesos, por las prerrogativas que el INE –de nuestros impuestos- da a las asociaciones partidistas.
Para quedar bien con sus compañeros de partido (PRI) siendo diputada, con los dineros del SNTE obsequiaba computadoras y cada año enviaba a las esposas de sus 36 dirigentes seccionales un centenario de oro. Dadivosa con dinero no suyo.
Siempre gustó verse bien, vestir a la moda, atuendarse con las mejores marcas del mercado internacional en bolsos, vestidos, zapatos, perfumes, accesorios, relojes, joyas, etc. Por ejemplo fue asidua clienta de las refinadas boutiques en California, Nueva York, Washington, Texas, Paris, España, en Polanco, en la CDMX, de donde gustaba comprar bolsos Louis Vuitton, con valor de 50 mil pesos. Era selectiva en su guardaropa por esos siempre adquirió modelos Chanel, Prada, Escada, Hermés, Diane Von Furstenberg, ropa de marca que oscila entre 3 mil y 60 mil pesos.
Qué padre que toda mujer sea vanidosa y vista bien, lo merece, pero ella, con sueldo de maestra o en su caso de líder sindical, no tendría posibilidades de adquirir costosa prendas… entonces además de cuestionable, es evidente que Elba Esther Gordillo, robaba las cuotas sindicales y los “extras” que le dieron sus “cuates” (presidentes de la república) en descarado delito de robo.
Pero no sólo gustaba de buena ropa y accesorios, no. Fue más allá, la riqueza malhabida le permitió adquirir muebles e inmuebles no sólo en México, sino en el extranjero.
Residencias, autos… Bueno, en Coronado Cays, San Diego, Estados Unidos, posee dos inmuebles a la orilla de un lago. En donde vive o utiliza para fines de semana tiene un valor de 5.6 millones de dólares. La puerta que da al lago, tiene un muelle en donde ancla un yate, también de su propiedad.
Y como dadivosa que es, a su hija Maricruz Montelongo, le obsequió una “casita” cercana a la suya, para estar juntas, con valor de 4.4 millones de dólares. Es decir, sólo en las dos propiedades la maestra chiapaneca “gastó” 10 millones de dólares… Aaaah, sin contar el valor del yate.
Como es muy exclusiva, y no codearse con la gente, Gordillo Morales, compró para sus traslados de la CDMX a San Diego los fines de semana y a otras partes del mundo un jet en el que se mueve a sus anchas.
Los días posteriores a su detención en Toluca, la PGR, en voz de su titular, Jesús Murillo Karam, informó que en las primeras indagatorias se comprobaron 22 pagos por más de 2 millones de dólares en compras con sus tarjetas de crédito en la exclusiva tienda departamental Neiman Marcus, en Dallas, Texas.
Esto apenas es una ínfima muestra de los excesos de Gordillo Morales, con dinero ajeno, recursos, insisto, de las cuotas sindicales y los “extras” donados por sus amigos.
A propósito de esto, y para restregar al gobierno peñista (PRI) y el próximo de López Obrador (Morena) que la amnistía a la “maestra”, puede ser legal, pero vergonzosamente es inmoral.
Se comprobó en voz de Noé Rivera Domínguez, en su tiempo Secretario Particular de Elba Esther, en el SNTE y luego operador financiero y político, que en los primeros 18 años de su reinado la señora ejerció de manera discrecional más de 104 mil millones de pesos, recursos que generaron intereses bancarios que jamás en ese periodo el Gobierno se ocupó o preocupó porque Gordillo Morales rindiera cuentas a la autoridad y a los agremiados del Sindicato.
Del sexenio de Carlos Salinas de Gortari la chiapaneca recibió un depósito bancario por 30 mil millones de pesos para crear el Fideicomiso “VIMA” (Vivienda Magisterial. Lavado de Dinero) para construir casitas de interés social que vendió a algunos maestros; pero también sirvieron como “regalo” para algunos de sus amigos y a diputados del PRI, por los “favores recibidos”.
El presidente panista Vicente Fox, también le entró a la corrupción con Elba Esther, al depositarle a su cuenta personal 100 mil millones de pesos, para incluirlos en el Fideicomiso “VIMA”, del cual nunca dieron cuenta, ni los presidentes, ni la lideresa.
Más aún, en esa danza de los millones, la señora desviaba el dinero público y sindical a su partido el PANAL, tejiendo redes en los 32 estados del país para financiar campañas políticas, con la complicidad, complacencia y omisión del INE, la Fepade, el TEPJF.
En fin… Elba Esther esta libre, por ley, pero moral, ética, política y socialmente se atentó contra la dignidad, la democracia y la credibilidad de los mexicanos.
*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT) y de Comunicadores por la Unidad (CxU)