Eduardo Sadot
El 7 de noviembre es una fecha emblemática para la señora presidente de la Comisión de Derechos Humanos, ella rinde protesta, el mismo día en que hace 47 años su esposo secuestrara un avión de mexicana en Monterrey.
Finalmente esta semana, el senado de la república voto el nombramiento de quien será ombudsman de derechos humanos el país, la designación recayó en la hija de Rosario Ibarra de Piedra, del mismo nombre Rosario Piedra Ibarra, su madre Rosario Ibarra de Piedra, miembro del Partido en el gobierno MORENA, igual que su hija, luchadora social a consecuencia de haber perdido en 1974 a su hijo Jesús Piedra Ibarra, guerrillero, miembro del grupo 23 de septiembre, su madre fundadora de la organización “Eureka” para búsqueda de personas desaparecidas, donde ella también ha sido activista en busca de su hermano. La nueva ombudsman, es viuda del Doctor Germán Segovia Escobedo, idealista y también guerrillero, miembro de la “Liga Comunistas Armados” autor intelectual del secuestro del vuelo 705 de Mexicana de Aviación el 7 de noviembre de 1972, que cubría la ruta en ese entonces Monterrey-Distrito Federal en el que viajaban los hijos del gobernador de Nuevo León Luis M. Farías, el empresario regiomontano Dionisio Garza Sada, el cónsul general de Estados Unidos en Monterrey Wesley Parsons y su asistente, el Ingeniero Jaime Lomelín Guillen funcionario de Industrias Peñoles, entre otros personajes y que fuera desviado a la Habana, para liberar exitosamente a guerrilleros de la liga 23 de septiembre a cambio del avión.
La intención del gobierno actual es transformar a los Derechos Humanos en una Defensoría de Oficio, lo que sería un grave error.
Siendo del mismo partido del presidente Obrador, debiéndole el cargo, podrá hacerle señalamientos de fallas y abusos al gobierno actual, o correrá la misma suerte de la Secretaria Olga Sánchez Cordero, que después de años de prestigio, acabó con años de trayectoria personal y familiar. Será capaz de señalar abusos del gobierno emanado de un partido al que pertenece, cuando debiera ser independiente a los partidos, como tal vez lo haría el poeta Sicilia. Cuando la violencia, y la vocación del gobierno, de no reaccionar frente a manifestaciones violentas, dejarlos pasar, evidencia un gobierno con vocación anárquica, para sumir al país en el caos. Cuando el mismo presidente ha pintado su raya con Sicilia y las organizaciones sociales a las que estigmatiza, sin saber el significado de estigmatizar. (El Occidental)
@EduardoSadot