Ciudad de México.- El Comité Científico Asesor (CCA) del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) para el volcán Popocatépetl, integrado por especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad de Colima y del CENAPRED realizó su reunión extraordinaria número 67 para evaluar el comportamiento reciente del volcán.
Con base en el análisis de la actividad interna se ha identificado la variación de algunos parámetros, tanto sísmicos como de deformación. Por tanto, continuará el monitoreo permanente a través de todos los sistemas disponibles.
De acuerdo con los parámetros de monitoreo visual, sísmico, de deformación y de gases, se concluye que en el corto plazo se puede esperar una actividad similar a la observada en las últimas semanas, acompañada de explosiones de intensidad baja a moderada, sin descartar la posibilidad de emisiones de ceniza e incluso el lanzamiento de fragmentos incandescentes dentro del radio de exclusión de 12 kilómetros.
En el pasado geológico se han presentado emisiones en alguna de las laderas del volcán, por ejemplo, en la zona conocida como El Ombligo, sobre el flanco noreste. Éstas fueron similares a las observadas actualmente en el cráter, por lo que se reitera a la población respetar el radio de exclusión.
Después de realizar el análisis de todos los parámetros se concluyó que se mantiene el semáforo de alerta volcánica en el nivel Amarillo Fase 2. El monitoreo del volcán se realiza las 24 horas del día, los 365 días del año y cualquier cambio será informado a la población de manera oportuna.
El CENAPRED reitera a la población atender las siguientes recomendaciones ante la posible caída de ceniza:
• Cubrir nariz y boca con pañuelo o cubreboca, secos
• Limpiar ojos y garganta con agua pura
• Utilizar lentes de armazón y evitar los de contacto para reducir la irritación ocular
• Cerrar ventanas o cubrirlas y permanecer lo más posible en interiores
• Evitar la acumulación de ceniza en techos y patios
• Cubrir recipientes de agua para evitar su contaminación
El gobierno de México mantiene su compromiso por coordinar esfuerzos con el sector científico e incorporar los mayores desarrollos tecnológicos a la reducción de riesgos volcánicos, privilegiando la protección de la vida y el patrimonio de la población.