BALÓN CUADRADO
Jesús Yáñez Orozco
Ciudad de México.– Tiger Woods se recupera de la operación de emergencia por el accidente de auto que sufrió la mañana del martes. Digerida la sorpresa, el mundo del deporte respira con cierto alivio. Pero también se pregunta si este es el final de la carrera del mejor golfista de su generación.
A sus 45 años, y aún peleando por batir los pocos récords que se le resisten, el estadounidense sabe lo que es resucitar deportivamente. En el pasado, Tiger se ha sobrepuesto a nueve operaciones de espalda y rodilla, así como a grandes escándalos por infidelidades y otros accidentes viales que lo pusieron en el ojo del huracán.
Ahora afronta una rehabilitación de pronóstico todavía desconocido, después de que se estrellara solo en su auto en una carretera al sur de Los Ángeles.
Un accidente del que, en palabras del primer policía en auxiliarlo, “fue muy afortunado de poder sobrevivir”.
La policía apuntó el martes que Woods podría haber manejado a mayor velocidad de la permitida (72 km/h) en un tramo de carretera descendente y sinuoso. Pero el miércoles confirmó que el golfista no enfrentará cargos por conducción imprudente.
“Un cargo de conducción imprudente contiene muchos elementos, esto es puramente un accidente”, dijo el sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva.
El golfista fue operado de urgencia por graves heridas en la pierna derecha. Tiger sufrió fracturas expuestas en la parte superior e inferior de la tibia y el peroné; lesiones adicionales en los huesos del pie y el tobillo, según detalló un comunicado de su fundación la noche del martes.
El doctor Joseph Patterson, cirujano ortopedista especializado en traumatología, en la facultad de medicina de la Universidad del Sur de California, señaló que las heridas como las de Woods son las más habituales que se tratan en las salas de emergencias.
Patterson no trató a Woods y no quiso comentar específicamente sobre las lesiones del golfista, pero dijo que el riesgo de infección es muy alta para los pacientes con fracturas que laceran la piel.
“El tejido queda expuesto a bacterias, polvo y vestimenta. El desenlace puede ser peor si el tejido se infecta», dijo Patterson.
Desde Bradenton (Florida), donde los compañeros de Tiger están reunidos para competir en el torneo World Golf Championships, el comisionado de la PGA, Jay Monahan, dijo que lo más importante ahora es el bienestar futuro de la estrella y le expresó el apoyo total del circuito.