ANPERT. SIMEX.- Continuamos abriendo espacios en la programación de Radio Expresión México para mejorar los contenidos. Hoy toca dar la bienvenida a “ESCENARIOS POLITICOS DESDE LA ANPERT”. Con dos prestigiadas periodistas; Marta Eugenia Dávila, preocupada y ocupada en la defensa de los derechos de la mujer; y la prestigiada periodista Judith Álamo, ambas de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión. Hablaremos de la Mujer: cómo ha sido su empoderamiento; qué tan grave es la misoginia y desde luego también de las mujeres que han destacado en el ámbito político y empresarial.
Abriendo el programa Marta Eugenia precisa: históricamente las mujeres han estado sobre representadas en los espacios de poder y el empresarial. En la parte política, específicamente, explica Marta Eugenia, desde el año 2019 hubo una reforma al artículo 41 constitucional en el que se habla de la paridad de género; y se refiere a que haya una representación y participación equilibrada de mujeres y hombres en puestos de poder, por tanto, en la toma de decisiones: en la política, empresarial, social etc. Actualmente se convierte en un indicador a nivel global para medir cuál es la calidad democrática de los países. Si partimos de ello, nuestros indicadores no son los deseados.
Por su parte Judith Álamo señala: Si viéramos la situación de la mujer con respecto a las leyes podríamos hablar de una legislación de avanzada, que estamos entre los países más importantes del mundo, porque a la mujer se le dio una gran importancia, a esta cuestión de la paridad de género en los puestos de elección popular. También es importante este articulo 41 que se ha venido aplicando desde hace algunos años con muy buenos resultados, pero, una cosa son las cifras y la ley en México y otra cosa son los hechos.
En México no ha sido fácil para la mujer conquistas puestos públicos: en 1953 por primera vez la mujer vota, y por primera vez en los años 60´s hay 3 senadoras mexicanas. A lo largo de la historia de México, ha habido solamente 15 gobernadoras; actualmente tenemos dos que ya son electas. Algo muy interesante es que actualmente en el Congreso de la Unión hay paridad de género en la representación, es decir, casi el 50 por ciento de senadoras y senadores y casi 50 por ciento de diputadas y diputados.
Marta Eugenia, cita que hay avances en los gobiernos paritarios, a partir de la reforma del artículo 41, da el ejemplo de como se ha venido avanzando a lo largo de la vida política del país, pero esta paridad se da más en el gobierno federal que en los estatales en donde hay 9 gobernadoras y no necesariamente tienen gobiernos paritarios, en donde se deben concentrar los esfuerzos, es en los gobiernos municipales.
El patriarcado es parte de los obstáculos que se han convertido en naturales, desde anteriores generaciones han venido participando en la política con presencia mayoritaria de hombres por muchos aspectos, lo que ha provocado que entre más mujeres participan en la política más hechos violentos se suscitan hacia ellas.
Lo decía el maestro Pablo Navarrete: La plena participación de las mujeres está en la política, sin discriminación ni violencia, es un derecho humano universalmente reconocido y debe hacerse valer. Por fortuna hay muchos varones sumados a estos preceptos de la política que los asumen como suyos, aunque no son la generalidad vamos avanzando y somos ejemplo para otros países.
Judith Álamo considera que ha sido muy lento el avance de la mujer para empoderarse y llegar a puestos de elección y del poder público. Recordó que antes del año dos mil tuvimos 3 gobernadoras: Griselda Álvarez en Colima; Beatriz Paredes en Tlaxcala y Dulce María Sauri en Yucatán, con predominancia de un sistema patriarcal. En los últimos 22 años ha habido una gran diversificación y participación de la mujer en puestos de la política nacional, al grado en que, México está dibujando nuevas figuras en la política nacional, de ahí que, por primera vez, hubo una secretaria de gobernación.
Sin embargo, sigue, pervive el gran predominio de los varones y de la imagen presidencia sobre aquellas figuras que en este momento están en la palestra, como la secretaria de gobernación que fue designada por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador; ella reconoció que fue objeto de conductas misóginas, le pedían que se condujera como un ser de poder. Falta mucho por caminar, pero mucho dependerá de nuestro sistema político y de la influencia del poder ejecutivo, en este caso.
Marta Eugenia reconoce que enfrentamos resistencia en esta sociedad que es machista, patriarcal donde prevalecen los roles y estereotipos que impone la propia sociedad y si no se cumplen como hombres y mujeres, la misma sociedad lo reclama, y se traduce en discriminación o violencia; y cuando hablamos de política, pues hablamos de violencia política en razón de género contra las mujeres porque nos encontramos en esa dinámica de la lucha por el poder.
Reiteró su admiración por Elvia Carrillo Puerto, la primera mujer diputada, local en Yucatán, quien hizo muchas cosas por ser política, activista, feminista y sufragista. En Baja California, en 1954 Aurora Jiménez, fue la primera mujer diputada federal tuvo una historia trágica vinculada a la violencia política en razón de género.
En los últimos 4 años, la violencia política ha sido permanente en las competencias electorales; lo que comparte Judith, lo vemos reflejado al interior de las profesiones, de las responsabilidades laborales, también se ejerce la supremacía masculina al interior de las aulas, aunque no mayormente visible, porque hacemos política en todo: en el hogar en los espacios laborales, en las aulas, en los empresariales y en la misma política per se.
Tenemos que visibilizar en donde se le apuesta llegar a la igualdad, pero en estos espacios donde se hace permanente la discriminación y la violencia de otros tipos. Tenemos que reconocer los avances, pero tenemos que levantar la voz. La línea de tiempo que maneja Judith de las tres gobernadoras antes del 2000 de ahí ya suman 15 más dos en la antesala que es un porcentaje que nos permite observar que falta más por avanzar. Coincido en que las capacidades debieran de ser métrica para que las persona lleguen a los puestos de tomas de decisiones.
Al respecto Judith Álamo enfatiza: El gran reto en nuestra nación es romper con los modelos masculinos y los roles sociales predeterminados, y en este caso, en el área de justicia existe un grave problema por la incapacidad de muchos de los ministerios públicos, jueces y magistrados realmente a todos los niveles existe una falta de conciencia, de formación en cómo tratar a una mujer que ya ha sido victimizada y que se vuelva a someter a otra hondonada de violencia.
La única manera de detenerla es haciendo que avance la educación y que se cree una cultura donde los roles sociales cambien y se reasignen a cada hombre y mujer. Mientras no haya ese cambio seguiremos viendo a nuestro país con un gran problema de feminicidios, tenemos otro grave problema de violencia intrafamiliar en donde la víctima es la mujer, por hombres criados en una cultura machista.
Marta Eugenia destaca que existen protocolos para la impartición de justicia con perspectiva de género, lamentablemente son protocolos que ahí están en una política pública no efectiva. Al inicio de este año se convocó a la firma de un pacto nacional por una justicia abierta con perspectiva de género, lo celebro, pero celebraría más que no hubiera necesidad de que las autoridades firmen ese pacto; lo más importante es que esta iniciativa, nace de una iniciativa ciudadana avalada por las fiscalías, las instituciones académicas y hasta el INAI, pero esto nos da cuenta de cuáles son nuestras debilidades y cuáles son nuestras necesidades.
Judith Álamo refirió que no está de acuerdo con los grupos feministas radicales que destruyen, que aparecen de forma violenta cuando la mayoría de las mujeres hacen una protesta razonable y ellas agreden a hombres y mujeres policías por igual. Muchas de las veces porque no han encontrado en la justicia ninguna viabilidad para responder por la victimización o desaparición de algún familiar, son víctimas violentas, ojalá pudiera desparecer su radicalismo, pero no por una proscripción.
No estamos de acuerdo con sus métodos, pero buscan que se les dé solución a sus protestas; muchas terminan las manifestaciones, y llegan afuera del palacio nacional y en vez de una representante del gobierno, encuentran granaderos escondidos atrás de unas vallas, aventándoles gases lacrimógenos, ahí se tienen que ver otros procedimientos porque no están funcionando y nos confronta porque la violencia genera más violencia y la espiral no acaba.
Más allá de la contención es dar respuesta a sus demandas. Las políticas públicas deben partir de un nivel de mayor jerarquía para que puedan contener todo este desorden, para eso existe un gobierno para contener al anarquista.
Marta Eugenia: Aclaró que, sin coincidir con actos de vandalismo, si es menester señalar que: las autoridades utilizan la fuerza ilegal y en casos hasta violencia sexual para someter o silenciar a las mujeres que protestan contra la violencia de género: respuesta violenta que vulnera los derechos de las mujeres a su libertad de expresión, a su derecho a la reunión pacífica, etc. Lo que ahora se tiene que hacer, es seguir con las acciones de exigir que se respeten los derechos de todas y todos; que todos nos sensibilicemos, tomemos conciencia y mas parte activa en cualquiera de nuestros espacios y entorno para sensibilizarnos, no sólo las mujeres.
Judith Álamo: es momento de que luchemos por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres como lo decía Rosa Luxemburgo, y porque seamos igualmente respetuosos de nuestra diferencia de género, respetuosos de nuestras aptitudes y de nuestros quehaceres. Si aprendemos a colaborar en un principio de igualdad, cada quien sus aptitudes, circunstancias y conocimientos podríamos hacer un mundo más feliz, en el cual hay una problemática muy grave.
Tan solo en el tercer trimestre del 2022 se registraron 229 feminicidios cuya motivación principal fue el género y en 2017, México ocupo el segundo lugar en feminicidios en relación con 24 naciones tan solo debajo de Brasil. Sin embargo, en 2019, ocupó el primer lugar a nivel mundial. 59 por ciento de las mujeres que tienen pareja han sufrido violencia física, emocional y sexual; y ese, desde luego es un panorama gravísimo. Nos queda mucho por hacer.
Marta Eugenia, hizo un llamado a que, a través de los micrófonos de Radio Expresión México, nos informemos de manera permanente sobre nuestros derechos como mujeres, como hombres y que nos sensibilicemos en cuanto al derecho de denunciar, porque en nuestro país solo uno, de cada diez delitos se denuncian y en el caso de las mujeres solo 5 de cada diez denuncian. Y esto es parte de lo que tenemos que asumir como ciudadanía lo que implica saber ejercer nuestros derechos para hablar del empoderamiento, que es llevar a cabo las acciones que por derecho nos corresponden; incidir en los espacios a los que tenemos derecho porque no son una dádiva que nos dan y que la igualdad sea una realidad en todos nuestros espacios.
Judith Álamo: Los colectivos tienen razón al quejarse de este que es un problema estructural del gobierno actual que ha elegido una estructura machista radical donde a las mujeres no se les da la importancia que se les prometió, las mujeres no han podido avanzar como se les prometió en el 2017 durante la campaña.
En el presupuesto público que se les da a las mujeres, de acuerdo a un estudio, el noventa y tantos por ciento del presupuesto público asignado a diferentes instituciones de apoyo a la mujer, ahora se está manejando a nivel central, quitando muchos programas de apoyo, el Instituto Nacional de la Mujer sufrió una reducción en sus recursos y así casi todas las instituciones públicas.
No hay congruencia, si en un momento dado las mujeres piden mayor apoyo, es momento de que el gobierno voltee a mirarlas no solamente como botín electoral o político, sino realmente como un importante grupo social que enriquece todo lo que toca. Es momento de analizar bien porqué una política púbica está tan disociada de las promesas electorales y porque disminuyó de esa manera tan radical ajena al presupuesto público de egresos autorizado, el apoyo destinado a la mujer.
A manera de conclusión Marta Eugenia dice que se tiene que transversalizar la perspectiva de género, también en la asignación de presupuesto y por en cuanto a que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha acusado a los grupos feministas de afectar su gobierno, el tiene una visión muy tradicional de lo que somos las mujeres, lo que le ha impedido sensibilizarse con la agenda feminista y eso es muy lamentable porque si algo ha reivindicado la izquierda moderna, es precisamente ser sensible a los temas de la agenda de género; y en esta ocasión no ha sido así, lamentablemente.