Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México, que conduce Manuel Aparicio.
Los hechos violentos sucedido en pasado día 2 de diciembre en San Gregorio, Atlapulco, en la delegación Xochimilco de la Ciudad de México, son una clara muestra de la violencia que está por venir el año de 2023 y 2024; ¿Por qué no creerlo, si lo que se ha prometido no se ha cumplido y se ha provocado desde el Ejecutivo, una polarización como nunca se había visto?
En San Gregorio Atlapulco, pobladores exigían información sobre las obras de infraestructura hidráulica que se realizan en esa comunidad, como el Gobierno de la Ciudad de México no les proporcionó la información, decidieron detener las obras hasta no tener la información requerida.
Luego de que paralizaron las obras hidráulicas, empezaron a llegar patrullas y camionetas con policías, los pobladores de San Gregorio fueron “encapsulados” por cientos de policías, que usaron la fuerza, ya que con golpes de tolete fueron sometidos varios de los que se oponían al encapsulamiento, lo que provocó el enfrentamiento, ya que los pobladores del lugar, al ver que sus compañeros eran lesionados, empezaron a lanzar piedras contra los violentos policías.
La violencia se generalizó, hubo lesionados de los dos bandos.
¿Es necesaria tanta violencia por parte del gobierno que encabeza Claudia Sheinbaum?, cuando esa violencia se pudo evitar proporcionando en tiempo y forma la información de las obras que se realizan; porque los habitantes de San Gregorio hicieron saber, que les quieren traer aguas negras de Milpa Alta para sus chinampas y que eso no lo van a permitir, como tampoco van a permitir que el agua que tienen se la lleven a otros lados; por su parte el gobierno de la Ciudad de México, informó que se trata de obras de drenaje que fueron acordadas en asamblea.
Creo que alguien debe tener la razón, sin embargo lo más importante de este conflicto es la reacción violenta de la policía que, seguramente, no lo hizo por motu propio y sí recibiendo órdenes de los mandos policiacos, de someter con todo lujo de violencia a los pobladores de San Gregorio.
Claudia Sheinbaum quiere ser la candidata a la Presidencia de México, eso es más que evidente, la violencia que se generó deja claro que no va a permitir que protestas de grupos, afecten la aspiración que ha tenido y que evidentemente, le ha ganado la simpatía del presidente Andrés Manuel López Obrador para lograr su objetivo.
Lo que se viene para 2023 y 2024 son tiempos que seguramente estarán marcados por la violencia, por parte del gobierno que no van a permitir protestas de los habitantes de la Ciudad de México, aunque estas sean legítimas.
Tenía tiempo que no se daba la violencia en contra de la protesta ciudadana, vamos, ni siquiera fueron violentadas de esta manera las mujeres que protestaron en el Zócalo, que pintarrajearon las puertas de Palacio y agredieron a policías.
Quizá vengan ceses de funcionarios menores, pero ni Marti Batres, ni altos mandos de la policía serán motivo de responsabilidad por los hechos violentos.
Los tiempos han cambiado y la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum está mostrando su verdadera cara, como así los demostró también el morenista Salomón Jara, quien luego de tomar protesta como gobernador de Oaxaca, ordenó la represión en contra la comunidad triqui que se encontraba en el centro de esa entidad.
Se trata de otro de los cambios violentos que vienen con la transformación prometida por la 4T.
(Fotografía Proceso)
