María Esther Beltrán Martinez Fotos: Rodrigo Chapa
Chicago.- El Instituto de Arte de Chicago presenta la exposición Remedios Varo: Science Fictions (Remedios Varo: Ficciones científicas), integrada por más de 60 pinturas y dibujos de la artista hispanomexicana. Realizada con la curaduría de Caitlin Haskell, curadora de Arte Moderno y Contemporáneo del Instituto de Arte, y por la curadora invitada del Museo de Arte Moderno, Tere Arcq. Estará hasta el mes de noviembre del 2023.
El título de la exposición, Science Fictions, alude a las tensiones y posibilidades que Varo reunió en su trabajo mientras buscaba visualizar órdenes ocultas y verdades invisibles. Los materiales adicionales del archivo de la artista (caricaturas a gran escala para pinturas, cuadernos, bocetos, estudios detallados, efímeras y posesiones personales) ofrecen una comprensión aún más profunda de su práctica distinta y diversa. 50 obras son del acervo del Museo de Arte Moderno (MAM), perteneciente a la Red de Museos del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), que abarcan 22 dibujos, 11 cuadernos, seis objetos de su archivo personal y 11 óleos. De estas piezas, 19 cuentan con declaratoria de monumento artístico.
Está exposición es la primera dedicada a la artista en Estados Unidos en más de veinte años y la primera individual en este recinto en torno a una pintora surrealista.Esta selección de piezas creadas de 1955 hasta su muerte en 1963, representa un capítulo significativo en la carrera de Varo, que muestra su duradera contribución al arte moderno y los legados globales del surrealismo.
La exposición se basa en la tradición de 90 años del Instituto de Arte de recopilar, exhibir y producir nuevas investigaciones sobre obras de arte surrealistas, y marca un hito significativo en los esfuerzos del museo para expandir las fronteras de este movimiento global. En particular, esta será la primera exposición individual del Instituto de Arte dedicada a una pintora surrealista y a una artista que trabajó en México.
María de los Remedios Alicia Rodriga Varo Uranga, nacida en Gerona España, huyó de Europa en 1941 debido a los crecientes peligros de la Segunda Guerra Mundial y emigró permanentemente a la Ciudad de México, donde trabajó en medio de una comunidad de artistas mexicanos y europeos entre ellos Leonora Carrington, Gunther Gerzso, Kati y José Horna, Alice Rahon y Wolfgang Paalen, quienes se inspiraron en la cultura y la geografía de México.
Fue aquí donde Varo desarrolló su práctica única de yuxtaponer técnicas surrealistas basadas en el azar con imágenes provenientes de disciplinas tan diversas, como la astronomía, la ecología, la exploración geográfica, la crítica feminista, la magia, el misticismo, la psicología y el tarot.
“Remedios Varo fue una artista única y poderosa que entrelaza brillantemente dos impulsos aparentemente contradictorios de la pintura del siglo XX”, dijo Caitlin Haskell, curadora de Arte Moderno y Contemporáneo Gary C. and Frances Comer del Instituto de Arte.
Tere Arcq, ex curadora en jefe del Museo de Arte Moderno, dijo que en México Varo ha sido venerada como una figura de culto desde la década de 1950, su atractivo radica en la naturaleza enigmática de su trabajo, tanto en términos de su temática como de su técnica. “Remedios Varo, se sumergió en temas profundos y arcanos como la alquimia, la magia y el misticismo, fusionando antiguas creencias esotéricas con conocimientos científicos modernos, lo cósmico con el reino humano tangible y la sabiduría antigua con ideas vanguardistas. Se convirtió en una visionaria con una perspectiva única: una espiritualidad guiada por la coexistencia armónica de los seres humanos entre sí con otros seres vivos y con el universo más grande e interconectado”.
Agrega que por un lado, las obras de Varo están llenas de pasajes de abstracción material y, por otro, utilizó la narración de manera notable, mostrando cómo la imaginación creativa podía tener un alcance social y político.”Esta exposición brinda la oportunidad no solo de compartir las obras de Varo con nuevas audiencias, sino también de resaltar su lugar vital en nuestra concepción de la producción artística de mediados del siglo XX”.