Alberto Woolrich Ortíz*
El gobernado y, con mayor razón los políticos, que en la mayoría de los casos ignoran el contenido de nuestro Pacto Federal, carecen de la vivencia y de la compenetración profunda de la que están dotadas las togas de la abogacía independiente de la República, las cuáles contemplan día a día y en sus justas dimensiones los fenómenos jurídicos de corrupción y narco-política por los que atravesó en la época del neoliberalismo y atraviesa México en ésta Cuarta Transformación de la Nación.
No es posible que en nuestra Patria, no se nos haya podido, querido o sabido librar de esa desgracia.
Dos peligros muy serios acechan a nuestro México; la fácil seducción que ejerce la actividad del narcotráfico y sus enormes gananciales en cierto sector del ámbito de la política y la gobernanza, y la nula pretensión de ser investigada por la Fiscalía General de la República, a cargo de añoso y mañoso Alejandro Gertz Manero.
No obstante estos obstáculos, la Academia de Derecho Penal del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, A.C., se siente impulsada a buscar se indague, juzgue, sentencie y encarcele al responsable de ello, tomando en cuenta que se trata de dos fenómenos que han envilecido de manera sistemática a la justicia y a nuestra Patria.
A este respecto, el Colegio Nacional de Abogados, ha señalado que tanto que en nuestro Código Penal Federal, como en la Carta Magna, se encuentran impulsadas en las mismas ideas filosóficas, políticas y jurídicas, las cuáles buscan como tradición común el bienestar y dignidad de México. Ambos cuerpos doctrinarios constituyen en el ámbito de procuración e impartición de justicia la protección de los derechos del pueblo en contra de la delincuencia y ejercen funciones análogas para recuperar la dignidad de nuestra República.
Como resulta muy bien sabido por las togas del colegio nacional de abogados, las instituciones internacionales, lejanas desde un punto de vista de geografía pero estrechamente vinculadas por el espíritu de bienestar para la humanidad, luchan desde sus confines para que México recupere ese sitial perdido. Tal es el caso de la Drug Enforcement Administration (D.E.A. por sus siglas en inglés), la cuál cuenta con la información verídica, obtenida de sus investigaciones derivadas de las declaraciones del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, en las que señaló con nombre y apellido al alto funcionario del neoliberalismo y crítico severo de la Cuarta Transformación de la República que protege y protegió las actividades de la narco-política.
En consecuencia, resulta absurdo que ni Alejandro Gertz Manero, ni Andrés Manuel López Obrador, actúen política y jurídicamente.
Es cuanto
*Lic. Alberto Woolrich Ortíz.
Presidente de la Academia de Derecho
Penal del Colegio Nacional de Abogados Foro de México, A.C..