Texcoco, Méx.- Como parte de los trabajos del Proyecto “Tesoros de Texcoco”, los trabajos de restauración de la Parroquia de la Inmaculada Concepción, que fueron autorizados y supervisados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), concluyeron satisfactoriamente y apegados a estrictas normas de calidad.
Tras tres meses de minucioso trabajo por parte de restauradores y arquitectos de la empresa Restauración y Construcción en General S.A. de C.V., quedó rehabilitado el exterior de la cúpula, la torre del campanario y el arco de la portada de la parroquia de la Inmaculada Concepción, uno de los tesoros de Texcoco declarado monumento nacional en dos ocasiones, 1933 y 1990.
Estas acciones fueron gestionadas por el Movimiento Antorchista de Texcoco y el ex diputado federal Brasil Acosta, para lo cual fueron etiquetados recursos federales por 10 millones de pesos para el mantenimiento de seis monumentos históricos de este municipio.
El artista plástico restaurador de bienes inmuebles, Cristian Eduardo Sánchez Hernández, explicó que la intervención realizada a la parroquia, se llevó a cabo con apego a las técnicas del siglo XVI y con la aplicación de materiales de la más alta calidad, así como por medio de un dictamen y estudios químicos.
Algunos de los trabajos ejecutados fueron la reposición y la reparación de las figuras del arco de cantera que adorna la entrada a la parroquia; la restauración de elementos ornamentales de la torre la cual luce decorada con pintura de cal en tres tonos autorizados por el INAH con base en una propuesta de las tonalidades utilizadas en el periodo de 1900. En la cúpula fueron retiradas las grietas y las fisuras; los techos fueron impermeabilizados con alumbre y jabón, método tradicional que impide el paso de la humedad y brinda ventilación a los aplanados.
Una aportación adicional fue la elaboración de material en 3D, mismo que servirá como una guía y testimonio para futuras restauraciones. “Con esta representación gráfica quedaron plasmados los detalles de la torre, la cual cuenta con elementos de barroco novohispano realizado por indígenas”, explicó el restaurador.
Al respecto, Aurelio Jiménez, de 85 años de edad ex sacristán de la parroquia, recordó que a lo largo de muchos años la Parroquia de la Conchita, fue restaurada con pequeñas aportaciones hechas por los feligreses. En este sentido, reconoció la iniciativa de Brasil Acosta, al gestionar recursos para estos trabajos.