Texcoco, Méx.- En un análisis en torno al tema del Hoy no circula, el economista y líder social en Texcoco, Brasil Acosta, señaló que las restricciones que afectan a los automovilistas de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México, tiene más que ver con cuestiones económicas que con el tema ambiental.
¿A quién va dirigida la medida ambiental?, cuestionó en texcocano. “A aquellos cuyos vehículos son “viejitos” y ¿cuál es la tirada? Sacarlos de la circulación. ¿Para qué? Para obligarlos a que adquieran más vehículos nuevos”.
“Con estas restricciones, las empresas automotrices se beneficiarán de aquellos que retiren sus vehículos de la circulación, pues si quieren circular tendrán que adquirir un carro nuevo; los bancos de crédito, harán su agosto y los que queden desplazados del transporte de carga o público, serán sustituidos por los consorcios poderosos”.
El texcocano expuso que la competencia entre marcas de vehículos se intensificó a partir de la apertura comercial de los noventa con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que repercutió en el incremento de la flota vehicular en el país en un 271 por ciento.
“Como se ve, la apertura comercial empujó a la población a adquirir vehículos más baratos por la competencia, pero todos eran motores contaminantes de combustión interna. Asimismo, el desarrollo del sistema de crédito para adquirir vehículos coadyuvó significativamente a que se hicieran las adquisiciones de carros”.
Con relación a los gases contaminantes que se generan en la Zona Metropolitana y en el Valle de México, ZMVM, Brasil Acosta señaló que estos representan el 7.2 por ciento del total nacional; el sector transporte, por su parte, contribuye con el 60 por ciento.
“El problema de la contaminación ambiental tiene su causa en el afán de lucro que es el motor de las empresas en el sistema capitalista en que vivimos, por ello, que el ambiente se deteriore: no importa, siempre y cuando las empresas automotrices y todas las que se gravitan en torno a ella (autopartes, llantas, etc.), obtengan sus metas de ganancias
Por último, expuso que las normas son discriminatorias toda vez que quienes no puedan obtener un crédito para adquirir un vehículo no contarán con otra opción que recurrir al amparo para no ser víctima de una arbitrariedad. “El problema del medio ambiente no se va a resolver si el afán de lucro sigue siendo la nota principal que marque el ritmo de la vida moderna”.