A la opinión pública nacional.

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Toluca, Méx., Octubre de 2016

A la opinión pública nacional.

¡Alto a los atentados y amenazas de muerte contra líderes antorchistas en Puebla!

A cinco días de que sufriera un atentado del que logró salir ileso, el día jueves 6 de octubre, a las 10:12 de la noche, el dirigente del Movimiento Antorchista en Cuayuca de Andrade, Ing. Nibardo Hernández Sánchez, recibió un mensaje de muerte en su teléfono celular, que dice así: “hijo de la chingada ing. Pendejo, sigue lo demás, sabemos dónde andas y conquien, fuera de cuayuaca , lo demas muy pronto…….” (sic).
El lenguaje soez, bajo, insultante y brutal del escrito, no deja lugar a dudas que busca sembrar terror en quien lo recibió, y en sus compañeros de lucha. Para evaluar la gravedad de la amenaza, para que nadie tome nuestra alarma como una exageración sin fundamento, a este hecho hay que sumarle otro más delicado y que también denunciamos en su momento: el día 1º de octubre a las 6 de la tarde, el mismo destinatario del mensaje amenazante, Ing. Nibardo Hernández, fue víctima de un atentado del que logró salir ileso. En efecto, cuando se dirigía a la cabecera municipal de Cuayuca de Andrade, proveniente de una comunidad llamada El Organal, un comando armando les disparó en varias ocasiones; en tres de ellas, las balas impactaron en la camioneta, una en la parte trasera y dos en el toldo. Este dato es muy importante, porque nos dice a las claras que el comando disparó a matar y que si esto no sucedió fue por la rápida reacción de quienes se vieron amenazados.
Ambos hechos, el atentado y mensaje de muerte posterior, no son crímenes comunes, es decir, producto de un “ajuste de cuentas” o “rencillas” personales del Ing. Nibardo Hernández, sino que se trata de crímenes que tienen que ver con el trabajo de activismo político que desarrolla en aquella zona de la Mixteca Baja Poblana, una de las más pobres y olvidadas del país por el gobierno estatal y federal.
Como todo mundo sabe, en Cuayuca de Andrade el H. Ayuntamiento Municipal es dirigido por dos antorchistas, la alcaldesa Graciela Perea Aranda y el Ing. Nibardo Hernández Sánchez, quien funge como Secretario del Ayuntamiento. Este gobierno ha resultado muy benéfico para los pobladores gracias a la gran labor de gestión y capacidad de solución de varias demandas que durante decenas de años habían quedado pendientes. En muy poco tiempo, el gobierno antorchista logró hacer inversiones en obra pública que los pobladores ni siquiera habían soñado, razón por la cual se ha ganado el cariño, admiración y adhesión total a su proyecto, de la mayoría de la población que ve con buenos ojos la forma honrada y abnegada en que trabajan el Ayuntamiento y Antorcha.
Sin embargo, este respaldo de la población no es bien visto por quienes durante muchos años medraron y se enriquecieron a costa de exprimir al municipio, porque los aleja de su sueño de volver a gobernar Cuayuca. La cabeza más visible de este grupo de adinerados que forman en la oposición es el expresidente Álvaro Cabrera Alonso, que además, como se sabe en la zona, dirige a una banda de pistoleros que tienen en su haber varios asesinatos.
Nos parece sumamente grave que, tras hacer la denuncia penal en el Ministerio Público y de entablar pláticas con funcionarios del Gobierno del Estado de Puebla, las amenazas continúen. Por ello, consideramos necesario hacer algunas demandas que salvaguarden la vida de los antorchistas:
Primero. Exigimos la detención inmediata de los autores materiales e intelectuales. El Movimiento Antorchista Nacional exige que las instituciones encargadas de la justicia investiguen de inmediato y detengan a los autores intelectuales y materiales del atentado y las amenazas de muerte más recientes. No actuar eficaz y rápidamente es alentar nuevos crímenes que podrían tener las consecuencias fatales que nadie desea. En la zona, todo mundo conoce y ubica a los pistoleros.
Segundo. Exigimos seguridad para los antorchistas. Ya en otras ocasiones hemos tenido que llorar a nuestros mártires de Cuayuca y no queremos que una vez más los caciques vuelvan a hacer de las suyas. Exigimos que a nuestros compañeros se les brinde la seguridad necesaria para desarrollar su trabajo político, que ha resultado benéfico para la población que se está aglutinando en torno a los ideales de lucha por los pobres.
Tercero. No es el primer atentado que amenaza la vida de un antorchista. En un periodo de mes y medio, el antorchismo poblano ha sufrido dos atentados contra la vida de nuestros dirigentes. El 15 de agosto pasado, dos comandos armados balacearon la casa del dirigente de Antorcha en Coxcatlán, el Ing. Osvaldo Carrera, en el marco de una serie de marchas para pedir que la presidencia cumpliera con varios compromisos de obra y apoyos a la población. Ahora se trata del atentado contra el Ing. Nibardo Hernández. Recordemos también que, hace año y medio, el equipo de campaña de la actual diputada federal por el Distrito XVI, la antorchista Edith Villa Trujillo, sufrió dos atentados: un comando balaceó la casa de la suplente de la entonces candidata y otro comando se metió al domicilio del líder de Antorcha en Ajalpan e incendió su camioneta. Ninguno de todos estos actos criminales ha tenido una investigación seria por parte de los encargados de la justicia en Puebla. Pensamos que los caciques se enseñorean en el estado; por eso, ahora nos dirigimos a las más altas autoridades del gobierno estatal en espera de una respuesta.
Cuarto. Exigimos alto a los atentados contra nosotros. El Movimiento Antorchista es una organización pacífica que organiza a la gente para que exija los derechos que nos otorga, a todos los mexicanos, la Constitución Política. Por tanto, no hay razón para que se nos quiera acabar por la vía del asesinato y el crimen político. Somos hombres y mujeres que trabajamos bajo el amparo de la ley y, por tanto, exigimos que la ley nos proteja de las acciones ilegales que buscan frenar nuestra actividad.
Cinco. Comenzaremos una campaña de denuncia nacional. Nuestra organización desplegará una campaña nacional de denuncia y de manifestaciones para exigir seguridad. Llegaremos a cada rincón del país y cada mexicano se enterará de nuestra denuncia: en Puebla, el gobierno permite al crimen cometer fechorías y lo alienta con su inacción. En Puebla, el día jueves 10 mil antorchistas macharemos a Casa Aguayo y a la Fiscalía del Estado de Puebla.
Esperamos encontrar en el Gobierno de Puebla, que encabeza el Doctor Rafael Moreno Valle Rosas, la sensibilidad para atender este problema que involucra la vida de muchos luchadores sociales, cuyo único objetivo es ayudar a la gente a tener una vida digna.

Respetuosamente,

Movimiento Antorchista Nacional

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