EntreNosotros con María Esther Beltrán, el espacio para charlas con personalidades del Medio Artístico y Cultural, que inaugura el reconocido actor Aarón Cobos, hablando de Gypsy.
México ha llegado a una etapa en la que le urge una cirugía mayor para evitar que se nos vaya de las manos. Hay muchas cosas que no están funcionando, y ocurre así porque nuestros cuadros políticos, de todos los partidos, incluso aquellos que provienen de la sociedad civil, tienen como prioridad encontrar la fórmula que les permita evadir lo que señala la ley con tal de
Alguna vez tuve la mala fortuna de visitar a un subdirector de tránsito que presuntamente era mi amigo, con la finalidad de obtener de forma fácil una licencia de manejo. Fue en Acapulco y tendría yo cerca de veinticinco años. Cuando me recibió en su despacho y le señalé el motivo de mi visita entró uno de sus subalternos para avisarle
Uno de los problemas más graves para cualquier persona es llegar a la vejez. Y no porque la acumulación de años provoque acumulación de males o enfermedades, aunque nunca se tiene la seguridad de que se llegará en plenitud de facultades. Para decirlo mejor, son pocas las personas que alcanzan la plenitud sin padecer los estragos de alguna enfermedad. No es un problema menor puesto que cada día el número de ancianos crece exponencialmente, y la mayor parte de ellos presenta todo tipo de padecimientos propios de la edad y de la acumulación de peso y grasa corporal. Expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México advirtieron que el país tendrá más ancianos que jóvenes en el año 2050 debido a un descenso en el número de hijos en las familias y el incremento de la esperanza de vida.
Siempre he sostenido que a nuestros políticos les gusta hacer un tipo de política que choca contra cualquier definición por muy simplista que sea. “La Política es la ciencia que trata del gobierno y la organización de las sociedades humanas, especialmente de los Estados”, reza una de ellas. “Ciencia que trata del gobierno o la dirección de los Estados, las ciudades y las colectividades en general”, señala otra.
Sin lugar a dudas México ha entrado en una fase en la que el cinismo se ha convertido en la identidad de los poderosos. Si bien es cierto que el término “poderoso” guarda distintas connotaciones dependiendo del campo de la actividad humana, también lo es que en todos ellos existen hombres y mujeres cuyo cinismo raya en lo absurdo, pero que les ha resultado del todo bien para sus muy particulares fines. No es nueva la tónica del cinismo en los hombres y las mujeres de este país, pues quien al final consumó la independencia de la España, fue un cínico Iturbide que cambió de bando cuando entendió que la defensa de la Colonia estaba a punto de fracasar. Ni qué decir de quien se rebelara en su contra después de haber pretendido enamorar a la fea hermana del efímero Emperador, ese que después vendería cínicamente la mitad de nuestro territorio.
Pareciera que los gobiernos encabezados por Acción Nacional se distinguieron por los magros resultados y la forma tan cínica en que dispusieron de los recursos públicos. No es nuevo que los gobernantes dispongan a su arbitrio de las rentas públicas, pero la manera tan burda como algunos lo hicieron raya en lo absurdo y delincuencial. A la fecha la cuenta pública del 2002 que entregó Vicente Fox Quesada a la Cámara de Diputados no ha sido autorizada, y la causa es la desaparición de cerca de siento setenta mil millones de dólares de excedentes petroleros que a la fecha no han sido justificados, y no se sabe dónde quedaron o en qué fueron aplicados. Tampoco se ha tenido el valor de presentar las denuncias penales correspondientes.