Los conflictos en las tierras y territorios de los pueblos indígenas, así como la falta de inclusión en los procesos de paz, continúa siendo un desafío, subrayó este viernes el Secretario General de la ONU.
En su discurso de cierre del 15º Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, que sesionó del 9 al 20 de mayo en la sede del Organismo en Nueva York, Ban Ki-moon llamó a los Estados miembros y al sistema de Naciones Unidas en su conjunto a abordar ese problema.
Por su parte, el presidente del Foro, Álvaro Pop, un indígena maya q’eqchi de Guatemala, indicó que los conflictos, en su mayoría violentos llevan al desplazamiento forzoso con su consecuente impacto negativo sobre los medios de vida de esas poblaciones, además de la derivación más extrema como es el asesinato de líderes indígenas.
Algunos de esos enfrentamientos surgieron por la protesta y resistencia a proyectos de minería, tala de bosques y por industrias de petróleo, gas y explotación del agua, indicó el dirigente.
“Reconocemos que el origen de esa realidad de conflicto nace del interés por los recursos que se encuentran en nuestros territorios y que hemos preservado durante muchos años. El mensaje de este Foro es que el mundo necesita una nueva ética para producir riqueza, la actual no tiene futuro”.
Álvaro Pop subrayó que a pesar de todo, los pueblos indígenas quieren la paz y una muestra de ello es su participación en los espacios de debate con los Estados miembros, por lo que urgió a esas naciones a respetar el derecho a la autodeterminación, así como a la participación en los procesos de paz.