BALÓN CUADRADO/Agencias
Jesús Yáñez Orozco
Ciudad de México.- El primer ministro británico Boris Johnson anunció que gobierno contempla vetar de los estadios de futbol a todo individuo que sea encontrado culpable de ataques racistas en las redes sociales, como parte de la reacción de las autoridades por la anarquía que imperó antes y después de la derrota de Inglaterra ante Italia en la final del Campeonato Europeo
Johnson, en una comparecencia en el Parlamento el miércoles, dijo que era momento de actuar luego que tres jugadores de raza negra de la selección nacional de futbol fueron víctimas de insultos racistas en las redes tras haber fallado sus remates en la definición por penales que selló la derrota ante la escuadra italiana la noche del domingo.
El gobierno prevé añadir el racismo online en la lista de infracciones que pueden provocar un veto a los partidos, dijo Johnson.
“Lo que estamos haciendo son pasos prácticas para asegurar que la normativa de sanciones en el futbol sea modificado de manera que si a alguien se le encuentra culpable de ataques racistas online en el futbol, no podrá ir a los partidos”, dijo Johnson durante su comparecencia semanal de preguntas al primer ministro.
“No tendremos contemplaciones, no habrá excepciones, sin excusas”, agregó.
La justicia británica puede vetar a un aficionado si es encontrado culpable de una “infracción relevante” vinculada al partido, delitos como alteración del orden público o posesión de armas.
Si bien muchos aficionados se solidarizaron con Marcus Rashford, Jadon Sancho y Bukayo Saka tras los ataques en las redes sociales, activistas recordaron que el racismo en el futbol inglés es un problema persistente y a lo cual las autoridades no han sabido responder.
Sancho se refirió a lo ocurrido en un mensaje que publicó el miércoles en Instagram. Pidió a las generaciones más jóvenes de futbolistas que sean fuertes si padecen insultos racistas y “perseveren en el sueño”.
“No voy a pretender que no me di cuenta de los ataques racistas que yo y mis hermanos Marcus y Bukayo recibieron tras el partido. Pero tristemente no es nada nuevo”, escribió.
“Como sociedad”, puntualizó, “necesitamos ser mejores, y que esa gente pague las consecuencias”.
La final del domingo también fue manchada por los desmanes en el centro de Londres y alrededor del estadio Wembley, donde hinchas sin entradas lograron desbordar el dispositivo de seguridad para colarse en el recinto.
Varias voces han criticado a la policía de Londres por no haberse preparado mejor para lo que todo el mundo sabía iba a ser un evento de esta naturaleza.