Tras detallar una vez más ante diputados y senadores, asambleístas del DF, académicos, dirigentes políticos, analistas económicos, funcionarios públicos locales y federales, la urgencia de fijar el 82.86 pesos diarios el Salario Mínimo nacional, que responda al postula Constitucional de retribuir dignamente el esfuerzo del trabajador, en el Foro “La recuperación del Salario Mínimo: El Papel del Poder Legislativo”, el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, anunció, a manera de “el buen juez por su casa empieza”, que enviará a la ALDF varias Iniciativas de Reformas a Leyes y Códigos locales para que los proveedores del Gobierno de la Ciudad de México comprueben que a partir de 2015, pagan a sus empleados como mínimo 82.86 pesos diarios, si no es así, no podrán participar en las licitaciones sobre bienes y servicios que requiere la Administración.
Detalló que las Iniciativas comprenden a las leyes de Adquisiciones, de Arrendamiento, de Prestación de Servicios, de Obras Públicas, de Régimen Patrimonial y de Servicio Público, por lo que se creará la figura de Proveedor Salarialmente Responsable (PSR), como criterio o factor para decidir la participación en las licitaciones del gobierno local.
Más aún, adelantó que una vez conversado con el Presidente del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México, Juan Ayala, se determinó que a partir del 1 de enero de 2015, los empleados que vienen laborando con la figura de “honorarios” para integrarlos a la estructura con salario mínimo propuesto y prestaciones de seguridad social que actualmente no tienen, con ello, fue contundente, terminaremos con la pésima costumbre del Gobierno del DF de tener trabajadores por honorarios, que no tiene ningún beneficio.
Mancera Espinosa, retomó la reticencia y hasta críticas que surgieron a raíz de su Propuesta de aumento a los Salarios Mínimos, quienes hoy han reconsiderado su actitud y recordó que para que una persona pueda estar fuera de esta línea de pobreza extrema debe de ganar arriba de 82.86, porque al principio nos decían que era un capricho el 82.86.
Insistió que 82.86 es el punto, el indicador, el cálculo que ha hecho para una canasta alimentaria básica, no la complementaria, porque para llegar a la línea de bienestar social tendría que estar arriba de 171, eso lo dice el Coneval.
Ante la selecta audiencia, que en su manos estará la decisión legal para lograr la fijación de los Salarios Mínimos digno, aseguró que si el Estado mexicano tiene un grupo de expertos que todos los años analizan los índices, los factores de pobreza y determinan cómo se puede dejar la pobreza, me parece que no tiene razón de ser que nosotros vayamos en contra de lo que se nos está informando, no tiene ninguna razón de ser.
Recordó que la acometida también argumentó que no se podía aumentar porque generaría inflación. Nosotros acusamos un punto de razón por la tarea que se le ha dado al Salario Mínimo, para fijar multas, como parámetros, para la prestación de créditos, para establecer si un delito es grave o no, para eso está sirviendo el minisueldo, por eso no está cumpliendo con el mandato Constitucional de servir como fuente remuneradora del trabajo prestado, de eso no funciona.
Aseguró que con la disposición receptiva y propositiva de la ALDF se logrará la desindización, es decir, desindizar el Salario Mínimo es la primera tarea, un compromiso. Lo saben y analizan los Senadores, Diputados, Asambleístas, los líderes sindicales, los organismos cúpula empresarial y vamos por la ruta correcta, sostuvo el Jefe de Gobierno.