Blas A. Buendía
“Hola a todos. Me acabo de poner la vacuna. Todo el personal médico no hay problema. Me revisaron credencial del INE, anotan tus (mis) datos en una hoja. Me pasaron a un cubículo y me vacunaron pero…, aquí viene el problema…
“Me mandaron a una carpa donde estaba un grupo de hombres y mujeres con un chaleco, obvio del color del partido Morena con escudos del gobierno, eran como 10.
“Entregue la hoja con mis datos y me pidieron la INE para tomarle foto pero junto a mi había una señora que se negaba a que le tomaran foto al INE y además foto sin cubre-bocas con el celular de ellos. La señora se negó y yo me estaba negando pues no había necesidad ni de foto al INE ni una foto del rostro”.
Lo anterior se podría suscribir como el guion para una película de terror ya que en el liberalismo de las redes sociales, a comparación de la prensa que controla el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, ha servido como un eficaz instrumento de denuncia, que si bien es alentador dar a conocer los secretos del inmediato futuro del control del socialismo y luego del fatalismo del comunismo, México está cayendo en una espiral de mayor ingobernabilidad, que pese a todo y sin piedad alguna, López sigue marcando la Agenda Nacional.
En el fondo de este testimonio se agudiza una aparente normalidad entre quienes han corrido la suerte de vacunarse contra el Coronavirus, pero no así la desesperanza que viven millones de mexicanos que sortean cada día en no caer en desgracia, fallecer insólitamente a las puertas de los hospitales pues la frase lapidaria que pronunciara el zafio tabasqueño que el Covid-19 le había caído como “anillo al dedo”, se traduce en un patético anuncio que el 6 de junio habrá fraude electoral.
A las cuadrillas de los ahora famosos “Servidores de la Nación” –que para los críticos del sistema se trata de los “agoreros y sirvientes de la Nación”-, la sociedad en general los ve como enemigos del desarrollo, pero enfocado con una estrategia descomunal para llevar a México al socialismo, donde cada encuestado es obligado a un inusual cuestionamiento a quienes atrapan como sus víctimas, sobre qué piensan ahora con el número de contagios y muertes registradas en todo el país, pero que no dejará de ser la “peor crisis sanitaria registrada” en casi 90 años, es decir, mantener una psicosis que va deformando el rostro de la muerte asistida.
El testimonio particularmente de personas de la tercera edad quienes han acudido a los módulos improvisados en colegios y sitios públicos, para intentar que se les aplique la vacuna, una vez logrado, las entrevistas oficiales que está difundiendo el gobierno federal, son totalmente tendenciosas, riesgosas y altamente nocivas porque hacen creer que las autoridades sanitarias “están cumpliendo”, solo que este tipo de acciones se traducen en un cometido: preparar un fraude electoral para el seis de junio, fecha en que la sociedad deberá acudir a las urnas para sufragas y renovar el Congreso de la Cámara de Diputados de San Lázaro.
La sociedad está sumamente confundida ya que a través de los medios de comunicación se ha enterado de la existencia de diferentes vacunas contra el COVID-19, cómo actúan éstas en el organismo humano para combatir las infecciones y de cómo actúan para producir inmunidad.
Las autoridades de salud, conforme a las declaraciones del subsecretario del ramo, Hugo López-Gatell Ramírez, han retroalimentado el desconcierto ya que en el mundo de las redes sociales alertan que existen tres tipos de vacunas que (aún) están en proceso de ensayo clínico a gran escala (fase tres), sobre todo en los Estados Unidos de Norteamérica.
De tal suerte que las vacunas ARNm contra el COVID-19, está basada con una tecnología nueva, no obstante que se revela por igual cuáles son los lotes de las vacunas autorizadas y recomendadas.
En la medida que las vacunas contra el COVID-19 sean autorizadas y luego se recomiende su uso en los Estados Unidos, será importante tener información acerca de lo que ya se comienza a saber, cómo es el proceso de su seguridad después de la vacunación, así como información sobre los ingredientes, la seguridad y la efectividad.
Por el momento, hay dos vacunas autorizadas y “recomendadas” para la prevención del COVID-19: La vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech; la vacuna contra el COVID-19 de Moderna que corresponde a las vacunas en ensayos clínicos de fase 3. Al 28 de diciembre del 2020, sigue habiendo ensayos clínicos a gran escala (fase 3) en curso o previstos para tres vacunas contra el COVID-19 en los Estados Unidos:
La vacuna contra el COVID-19 de AstraZeneca;
La vacuna contra el COVID-19 de Janssen; y
La vacuna contra el COVID-19 de Novavax.
Regresando a México, el problema es que estos “sirvientes de AMLO” –revela un desesperado paciente mexicano-, “me amenazaron a mí y a la señora que estaba en fila de espera, en el sentido de que si no dejaba que me tomaran la foto del INE y la foto de mi rostro, me amenazaron textualmente:
“Pues si no nos deja tomarle foto al INE posiblemente no lo llamen para la segunda aplicación’. Tuve que acceder pero la foto de mi rostro no se los permití, así que me arriesgué a que no me llamen para la segunda aplicación.
“Percibo que es ahí desde donde el mal gobierno de López Obrador está ya fraguando un fabuloso fraude electoral este seis de junio, poniendo en mayor riesgo la salud de millones de connacionales”, puntualizó la afligida paciente de 65 años de edad.
En realidad, el gobierno del tabasqueño ya mostró su rostro mesiánico de la desesperación para supuestamente recuperar la credibilidad perdida con el inacabable cuento “primero los pobres”, a quienes en la praxis los ha conducido por el pasaje de la muerte. Una muerte anunciada. Una muerte asistida. Una eutanasia que por un voto inducido y negado para sufragar por MORENA, será un voto que lo trasladará con plena seguridad a la muerte. “¡Millones de mexicanos están en peligro!”, previene la Vox Populi.
Incluso, entre el mundo de los famosos memes, circula por redes sociales un aplicable consejo: “Alerta. No se dejen engañar a la hora de la vacunación. Adultos mayores no presenten su INE; muestren su INAPAN o cualquier otra identificación. ¡Fuera Morena! Haz viral este mensaje”.
En los Congresos del país, cientos de diputados federales y locales, han advertido que Morena busca no desintegrar su estructura electoral, por lo que ha incorporado a sus militantes como “Servidores de la Nación” en el Plan Nacional de Vacunación COVID-19, un plan maquiavélico y por demás violatorio a las leyes electorales y en contra de la propia Constitución.
La sociedad en general persiste a plenitud un amplio convencimiento: “México estaba mucho mejor sin López Obrador”, ya que el presidente de México ha cometido indefectiblemente tres infracciones morales que lo convierten en un potencial pecador por “mentiroso, un ratero y un traidor” en contra de la Nación.