Toluca, Méx.- Los edulcorantes artificiales, considerados una alternativa para pacientes con diabetes, no son sustancias necesariamente inocuas, pues su consumo produce cambios hormonales en la flora bacteriana y en la saciedad de los consumidores, señaló el investigador de la Universidad Autónoma del Estadio de México, José de Jesús Garduño García.
Al participar en el Segundo Curso de Hábitos Alimenticios, Peso y Metabolismo, organizado por el Centro de Investigación en Ciencias Médicas (CICMED) de la UAEM, destacó que los sustitutos de azúcar, creados originalmente como una alternativa para pacientes con diabetes mellitus, han demostrado no ser tan inofensivos.
Al hablar de los efectos metabólicos de los edulcorantes artificiales, el especialista de la Máxima Casa de Estudios mexiquense subrayó que la diabetes ocupa el primer lugar de causas de muerte en México y representa un impacto económico anual aproximado a los siete mil 800 millones de pesos.
El integrante del Cuerpo Académico “Salud en el Universitario” dijo, se cree que los edulcorantes son sustitutos saludables para los azúcares, debido a que proporcionan sabor dulce sin calorías o efectos glucémicos, pero el uso en grandes cantidades conduce a un aumento del riesgo para el cáncer de vejiga en humanos. Reconoció que una determinación más precisa del consumo no es posible, debido a que muchos edulcorantes artificiales se combinan en productos alimenticios actuales.
José de Jesús Garduño García, señaló que estudios revelan que los edulcorantes pueden cambiar ciertas situaciones enfocadas al metabolismo y la saciedad, entonces una persona que los consume generalmente no tiene el mecanismo de saciedad o no alcanza el mismo grado de saciedad que cuando ingesta glucosa naturalmente, así que terminan teniendo mayor ingesta de calorías, pues no se sienten satisfechos.