San Bartolo Morelos, Méx.- Pese a marcha, mítines, volanteos y comisiones en busca de diálogo, el alcalde de San Bartolo Morelos Osvaldo Chavarría Villar, continúa sin atender las demandas de los campesinos, quienes desde hace más de once meses, cuando llegó a la presidencia, denuncian que el diálogo fue nulo y las complicaciones para conseguir apoyos asistenciales y obra pública de las familias de San Bartolo Morelos se incrementaron, “para los antorchistas nada” esa ha sido la política de este alcalde que carente de sentido común a decidido ignorar sus peticiones
Entre las obras faltantes en Morelos se encuentran: cunetas para el camino de la Lagunilla al Madroño, relleno sanitario para el Ejido de San Gregorio, luminarias para San Gregorio barrio primero, ampliación y electrificación en San José Epifanía y pavimentación del camino Puente de Fierro a la Piedra del Corazón.
Han sido incontables las ocasiones en las que los habitantes de este municipio han salido a las calles a denunciar la falta de atención de Chavarría Villar, sin que a la fecha se haya obtenido respuesta favorable, al parecer al presidente municipal no le interesa tratar con los pobres. Las oportunidades en el municipio para los morelenses son nulas, no hay fuentes de empleo y las comunidades apenas y cuentan con algunos servicios básicos; mientras que hay otras donde sus habitantes sobreviven.
Por otro lado en Jiquipilco, la presidenta municipal, Marisol González Torres, se negó a dialogar con cientos de campesinos provenientes de distintas comunidades, que cansados de esperar solución a sus demandas decidieron realizar una marcha por las principales calles del municipio a quienes se unieron, amas de casa, obreros y taxistas en contra del mal gobierno de una dama que no ha sabido resolver las necesidades de los pobres.
Leonel Navarrete Lucas, dirigente social en el municipio y los cientos de campesinos, caminaron por las calles, repartiendo volantes a los transeúntes a quienes invitaron a unirse a su lucha y al llegar frente a la presidencia municipal decidieron esperar que la alcaldesa los recibiera, su apretada agenda se lo impidió y en su lugar salió un servidor público que nada pudo resolver.