Blas A. Buendía
Conforme al avance de los tiempos electorales para la renovación de la Presidencia de la República para 2018, en el entorno político y social se han ido escuchando diversas acusaciones, mucho muy graves, y una de ellas fue la de Rafael Acosta, quien lo distingue una cinta tricolor que luce en su cabeza como símbolo del patriotismo mexicano. “¡Es un horror estar con López Obrador!“
Mejor conocido como Juanito, definitivamente explotó en contra del soberbio López Obrador, a quien retó a un debate público porque, afirma, Andrés Manuel es un “mafioso” y un “delincuente”.
El mensaje fue video-dirigido a todos los núcleos sociales de México, a través de las redes sociales (https://www.changoonga.com/juanito-llama-mafioso-y-delincuente-andres-manuel-lopez/#.WY8gdXBehj4.facebook), donde sencillo como siempre, el ciudadano ejemplar de la Delegación Iztapalapa, ha buscado los reflectores de la prensa en general para lanzar un “¡Yo Acuso!”
De hecho, Rafael Ponfilio Acosta Ángeles, alias “Juanito” activista político mexicano regresó a los reflectores de la polaca. En los lugares públicos donde se para, hace arengas en contra del tabasqueño, y la gente le aplaude porque coinciden con Rafacosta, “nosotros no votaríamos por un baboso que muestra debilidades de un idiota”.
Mediante un video a través de su cuenta de Facebook, el ex jefe delegacional en Iztapalapa, gritó con todo lo que pudo en contra de Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional de Morena.
Y al estilo del monstruo de Frankenstein, se rebeló y atizó duramente contra su creador.
En donde además, Juanito aseguró que “AMLO es un peligro para México y para los mexicanos”.
“Estamos mal con (Enrique) Peña Nieto, pero estaríamos peor con López Obrador. ¡Es un horror estar con López Obrador!“, sentenció Acosta Ángeles.
El político más conocido por sus escándalos, sus metidas de pata, hermanó a López Obrador con el comandante Hugo Chávez, el tirano que ya no tiene Venezuela, pero el cargo de presidente de ese país, lo heredó Nicolás Maduro, que de forma inmadura ha sabido gobernar con el garrote vil, al muy estilo del franquismo.
Dijo que en caso de que AMLO ganara la presidencia estaríamos peor que en Venezuela y nos estaríamos peleando por un bolillo o una tortilla. “Y lo digo: López Obrador es un mafioso, un delincuente, un asesino, Dios nos libre de que llegue a la presidencia”.
Si bien el famoso Juanito emitió estas intrigantes declaraciones, para finalizar su disertación, el ex delegado iztapalapense, retó a López Obrador a un debate público “donde quieras y a la hora que quieras”, y lo acusó de mandarlo a matar, quemar su casa y secuestrar a dos de sus hermanas.
“Tengo en mi cuerpo las cicatrices de seis balazos que tus matones intentaron desaparecerme no solo del mapa político, sino de esta vida terrenal”, puntualizó en un mensaje que mostraba coraje y resentimiento por la mala vibra que representa López Obrador para los millones de mexicanos que se quejan de la existencia de un fenómeno xenofóbico, la aplicación de “Crímenes de Odio y de Discriminación”.
Es decir, el racismo ideológico a favor del Peje, se da por el incremento de la intolerancia pertenecen a grupos, pandillas o movimientos afines con que se gobierna el partido Morena.
Dándole un sesgo riesgoso, podría concatenarse con la odiosa retórica que continuamente se escucha en medio de una sociedad que se halla crispada por la vertiginosa crisis económica y la falta de empleo.
La configuración de estos hechos se concatenan en lo que podría también significar el anecdotario criminal de López Obrador, ya que este político de origen tabasqueño, jamás ha dejado de pertenecer a ese “basurero de la historia” del priismo nacional.
El mismo sistema le creó un contenedor de desechos humanos políticos, a través de su partido MORENA, el cual muchos agentes de la izquierda rebelde, se han ido a refugiar inconmensurablemente y que ha ido aglutinando a cuanto cartucho quemado pretenda darle cobijo, aun cuando en el pasado lo hayan traicionado infinidad de sus antagonistas ahora cómplices del quehacer político nacional.
Hay que puntualizar para que esté enterada toda la SOCIEDAD y del por qué es un PELIGRO PARA MÉXICO.
López Obrador padece de una esquizofrenia palpable, le puso de nombre a su último hijo JOSÉ RAMÓN, producto de su amor con su entonces asesora privada durante su gobierno, Beatriz Gutiérrez Müller, en memoria de su hermano al que “accidentalmente” asesinó de un balazo en la cabeza cuando eran plenamente jovencitos, y cuyo incidente se niega a ahondar en este crimen, que para su comunidad, se trató del Caín de Tepetatilán, Tabasco, en la década de los 60:s.
Si López Obrador hubiera desde un principio aclarar ante la opinión pública porque su hermano José Ramón cayó muerto luego de una detonación con una arma de fuego, en su presencia; si hubiera demostrado su “honestidad valiente” y su transparencia como político, desde hace dos elecciones federales ya hubiera llegado al pináculo de Palacio Nacional, pero como se niega hacerlo, esa cima se convierte en la sisma de su desgracia. [email protected]