Miguel Ángel Casique Olivos
Dos crisis: la transitoria de AMLO y la que viven millones de mexicanos
No creo que exista en el mundo otro presidente que “cometa” tantos errores, planeados o no, como el de México, el morenista Andrés Manuel López Obrador (AMLO); porque él podrá decir que no conoce la información que divulga su Gabinete o la Secretaría de Hacienda y que tampoco cree en los datos de esas instituciones, pero esos, a mi juicio, son de los peores errores que puede cometer un mandatario nacional que fue electo por la mayoría de los mexicanos y que prometió cambiar los viejos vicios y errores que se cometían en gobiernos anteriores; pero ahora, parece que las cosas estaban mejor cuando todo estaba peor.
El jueves 2 de abril AMLO comentó que no sabía ni conocía lo que Hacienda había dicho públicamente sobre los puntos de política económica para el próximo 2021, aspectos que habían sido difundidos el 1 de abril donde se preveía la caída de 3.9% del Producto Interno Bruto (PIB). Pero como ya es común del presidente, dijo que la dependencia, su dependencia, estaba equivocada y que no creía en ese dato.
¿Es en serio?, ¿otra vez el presidente vuelve a rechazar lo que sus Secretarías e integrantes de su Gabinete dicen? Pero eso no fue todo, hoy nos damos cuenta que López Obrador no sólo no cree en los datos de su gobierno, sino que asegura que lo que los mexicanos estamos viviendo es una “crisis transitoria y que no habrá una debacle económica” aunque todo mundo vea y piense lo contrario; además, ha dicho que es “una crisis que vino como anillo al dedo para afianzar el propósito de la transformación”; “sic” y más “sic”.
La crisis que todos vemos no se puede ocultar, y no sólo se trata de verla, sino de analizar lo que seriamente dicen las instituciones encargadas de esos estudios, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco de México. AMLO Ignora lo que pasa con México y prefiere no ponerlo en su discurso y sacar, como siempre desde que llegó al poder, frases que le generan atención mediática aunque sean absurdas y torpes.
Ahora resulta que AMLO no ve la crisis como una tragedia para los mexicanos, sino como una oportunidad para afianzar su proyecto de la Cuarta Transformación (4T) y su proyecto ideológico, aunque habría preguntarle qué entiende por transformación, porque las problemas en México no sólo siguen igual sino que han empeorado; hay más inseguridad, más violencia, más pobreza, más insalubridad, etc.
Hoy, por ejemplo, se sabe que el gobierno morenista ya blindó sus proyectos madre como el Aeropuerto de Santa Lucía y el Tren Maya, a pesar de que todos los precriterios económicos aseguran y contemplan en México un recorte de no menos de 405 millones de pesos para el PEF 2021, esto por la caída del petróleo y en la recaudación de impuestos; su gran proyecto de Santa Lucía recibiría 27 mil 574 mdp, el 1,343 por ciento más que este año; el famoso Tren Maya le tocarán 26 mil 730 mdp, un alza de 969 por ciento. Mire nadamás, ¿qué cree usted que va a pasar con los hospitales, las escuelas, las unidades deportivas o, en general, con las obras para la población si un buena parte de los recursos del gobierno ya tienen destino?
Por otro lado, la crisis podría ser transitoria siempre y cuando se atacaran los problemas ante la pandemia del Covid-19; por ejemplo, si se evitara que el desempleo se agudice y la gente no tenga trabajo, ni ahora ni después de la cuarentena; por ejemplo, si se evitara que la producción en México se detenga y que las pocas empresas privadas que aun quedan en México, salgan del país; aquí valdría la pregunta de si en México el gobierno está preparado, con recursos económicos mínimos, para que la producción no se detenga y la crisis no sólo sea transitoria sino evitar que se profundice y ahonde.
Los empresarios están muy preocupados y molestos por la actitud del presidente, pues él no cree lo que especialistas económicos o los mismos empresarios le dicen; él sigue con sus criterios errados y fuera de la realidad, sigue creyendo que la crisis “le vino como anillo al dedo” para afianzar su proyecto de la 4T, proyecto de transformación que no se ve por ningún lado y sí, por el contrario, hay más, y por todos lados, inconformidad y malestar social. AMLO es un presidente irresponsable por que si hay un momento en el que se necesita una mayor inversión privada, es ahora, pero en lugar de incentivarla, se hace todo lo contrario, como sucedió con el cierre de la cervecera del norte del país. No cabe duda. no hay peor ciego, que el que no quiere ver; porque una es la crisis transitoria de AMLO y otra la crisis que viven millones de mexicanos.
El clímax no político…
Otra de alcaldes que dejan sin agua a las familias. Nos encontramos que en plena cuarentena, familias del municipio de La Paz sufren el desabasto de agua potable; denuncian que el Opdapas La Paz no soluciona la carencia de este líquido que afecta a más de 18 mil familias que habitan en la zona de la ex hacienda San Isidro, por lo que exigieron un programa municipal para dotación de agua gratuita con pipas.
A través de redes sociales familias denunciaron que la escasez de agua potable es irresponsabilidad de la administración municipal y del director del Opdapas La Paz, Oscar Pedro González, pues pone en grave riesgo de contagio a miles de familias de la zona que no se pueden lavar las manos, ni sanitizar sus viviendas ni mucho menos lavar sus vegetales. ¿No será una alcaldía de la 4T?, por su modus operandi, parece que sí. Por el momento, querido lector, es todo.