Miguel Ángel Casique Olivos
Hay que levantar la voz ante el brutal aumento de homicidios
La paz, la tranquilidad y estabilidad social de nuestro México son golpeadas y amenazadas por el crecimiento incontenible de la inseguridad pública, la violencia delictiva y, desde luego, por la impunidad de la que gozan muchos delincuentes y asesinos debido a la ineptitud de las autoridades judiciales de los tres niveles de gobierno: Federal, estatal y municipal.
En el primer cuatrimestre de 2023, pero especialmente en mayo, la violencia se ha recrudecido y muchos civiles perdieron la vida. El dos de mayo, Teresa Magueyal fue asesinada por dos sujetos, “madre buscadora” de Guanajuato que desde 2020 hacía todo lo imposible por encontrar a su hijo desaparecido. El crimen fue severamente condenado.
Esa misma semana en el poblado de Ahuatepec, cercano a Cuernavaca, una familia de cinco miembros fue atacada a balazos por un comando armado que entró a su hogar, los asesinó y luego huyó a bordo de camionetas. El siete de mayo, pero ahora en Chihuahua, Refugio López, quien fue director de Desarrollo Rural de Guadalupe y Calvo, fue asesinado dentro de su vehículo; ese mismo día, en Ciudad Juárez, el municipio más violento de esta entidad, hubo 10 homicidios dolosos cuyas víctimas fueron civiles.
En Zacatecas fue balaceado el hijo de una jueza, cuando el joven salía de su vivienda. Michoacán guardó luto cuando autoridades de la entidad difundieron la muerte de la influencer Tania Guzmán, de 23 años. Días después, en la madrugada del 14 de mayo, en la alcaldía Tlalpan de la Ciudad de México (CDMX), hubo una balacera en la que murió una niña debido a una bala perdida; y 11 personas resultaron lesionadas.
El 15 de mayo, un turista argentino fue asesinado con un machete en Chacahua, poblado de la Costa de Oaxaca. Al día siguiente, en la misma entidad, otro turista, pero canadiense, falleció por un disparo de arma de fuego. El 20 de mayo, durante el rally de autos denominado “Cachanillazo”, que se corre a un lado de la carretera Transpeninsular de Baja California, un grupo armado abrió fuego contra algunas personas y provocó la muerte de 10 espectadores en el pueblo San Vicente, municipio de Ensenada.
De estos hechos sangrientos, en los que muchas de las víctimas fueron personas ajenas a los conflictos entre los grupos delictivos, las autoridades encargadas de la procuración de justicia y los gobernantes han omitido todo. De acuerdo con el reporte del Índice de Paz Global, efectuado por el Instituto por la Economía y la Paz, México ocupa el lugar 137 en inseguridad pública de los 163 países evaluados; es más inseguro que Guatemala, El Salvador y Haití; y en 2022, ocho de sus ciudades figuraron en el ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo que configuró el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia. Entre las 17 ciudades que se hallan en el top 10, hay nueve mexicanas: Colima, Zamora, Ciudad Obregón, Zacatecas, Tijuana, Celaya, Uruapan, Juárez y Acapulco.
En lo que va del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se han registrado 154 mil 787 homicidios; y se estima que cuando termine su administración, el saldo será de 209 mil 494, cifra que superará los 156 mil 066 reportados en el gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) y será casi tres veces mayor a los de Vicente Fox Quesada en cuya administración hubo 60 mil 280 homicidios.
En el primer cuatrimestre de 2023 en 13 de las 32 entidades de la República aumentaron los homicidios dolosos respecto al mismo periodo de 2022, de acuerdo con las cifras más recientes del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Entre enero y abril de este año, se contabilizaron nueve mil 912 asesinatos, 26 más que el año pasado, lo que representa un incremento del 0.26 por ciento.
Los homicidios aumentan y la estrategia de AMLO no ha dado los resultados esperados. México se desangra brutalmente, y la población padece más temor que nunca. La política de “abrazos no balazos” únicamente ha propiciado más violencia criminal. Por ello, ahora se está impulsando una campaña nacional para exigir el esclarecimiento de los 154 mil homicidios, entre ellos el del artero asesinato de tres antorchistas inocentes cometido hace unas semanas en el estado de Guerrero. Por el momento, querido lector, es todo. (Fotografía principal Excélsior)