Adamina Márquez y Sergio Pasarán Hidalgo pretende ser el nuevo destino económico de México, o así reza la campaña lanzada por el gobernador priista Omar Fayad Meneses, quien este año se ha jactado de lograr 13 mil millones de pesos en inversión extranjera para el estado. El objetivo, según ha reportado a la prensa, es la de atraer capitales extranjeros para generar empleos, el mismo discurso utilizado por su antecesor Francisco Olvera y, antes de él, por Miguel Ángel Osorio Chong. Sin embargo el costo de esta política es demasiado alto, pues mientras el gobierno estatal destina millonarios recursos para aplanarle el terreno a la iniciativa privada, se olvida de invertir en infraestructura y programas para los campesinos hidalguenses que se mueren de hambre, de enfermedad: de pobreza.