Por: Raymundo Medellín.
¿Se entregaron como testigos protegidos o los atrapó la DEA en combinación con el FBI?
Todavía se especula mucho sobre la detención de Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López “El Güero Moreno”, medio hermano de Ovidio; pero como reza el clásico “haiga sido como haiga sido”, están detenidos en los Estados Unidos y ellos traerá consecuencias para políticos mexicanos.
El día de ayer en redes sociales, luego de que se conoció la noticia, empezaron a publicar videos en los que señala que el más afectado sería el expresidente Felipe Calderón, sin embargo, recordemos que Calderón mantuvo buena relación con las instituciones norteamericanas, como son la DEA y el FBI, no así el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien ha tenido varios enfrentamientos principalmente con la DEA.
No olvidemos que el Cartel de Sinaloa tiene presencia en más de 40 países y esto durante más de 40 años en los que ha estado al frente de esa organización criminal “El Mayo Zambada, aunque desde los años setenta ya “El mayo” estaba en la organización del narco, sin embargo, ahora que el mayo se encuentra en manos de las autoridades, terminó una era en el mundo del narcotráfico mexicano, porque el Cartel de Sinaloa ya no será el mismo.
Sin duda, Ismael “El Mayo” Zambada, que en 50 años no había sido detenido, se acogerá al sistema de testigos protegidos, su salud y los enfrentamientos al interior del Cartel de Sinaloa, seguramente lo orillaron a entregarse y pasar los últimos días de su vida con una mayor tranquilidad.
El “Mayo” tiene información privilegiada que seguramente será entregada a los investigadores norteamericanos, información esta que podría ser utilizada en contra de la administración de Andrés Manuel López Obrador, a causa de la mala relación que este mantuvo, principalmente con la DEA, que en su momento lo investigó y que ha criticado la “pasividad” del actual gobierno para atacar a los cárteles de la droga.
En enero pasado se reveló, según una investigación realizada entre 2010 y 2011 por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York y la agencia antidrogas DEA, que se obtuvieron pruebas sólidas de que el Cártel de Sinaloa, habría aportado entre 2 y 4 millones de dólares a la campaña de López Obrador, cuando fue candidato a la Presidencia en 2006; López Obrador respondió con virulencia que qué tenía que hacer la DEA investigando al presidente de México.
En abril, AMLO acusó a Estados Unidos de “no respetar la soberanía” del país tras la publicación del informe anual sobre derechos humanos del Departamento de Estado, el cual denunció la violencia y la impunidad en México; dijo el presidente López Obrador que “Ellos no están acostumbrados a respetar las soberanías de los pueblos”, además respondió a los reclamos de la directora de la DEA, Anne Milgram, sobre los retrasos en la entrega de visas para las operaciones de 13 agentes de la DEA. “Creo que exageró, con todo respeto”, dijo López Obrador;
Milgram en la Cámara de Representantes, se quejó de que la cooperación del Gobierno de López Obrador, en la guerra contra el narcotráfico, la calificó de “inconstante”.
La mala relación entre la DEA y López Obrador auguran posibles sorpresas tras detención o rendición de “El Mayo” Zambada. Y nuevamente se pone en duda la capacidad del gobierno mexicano para combatir a los cárteles de la droga; esto sucede en medio de las declaraciones de Donald Trump sobre que México se ha quedado “petrificado” frente los criminales. Afirmó refiriéndose a los carteles, que estos “Podrían quitar al presidente en dos minutos. Los cárteles son los que administran México”, dijo el candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos.
