Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México, que conduce Manuel Aparicio.
¿Servirán de algo las reuniones de gobernadores, para combatir la inseguridad que priva en los estados que gobiernan?
En Veracruz un comando armado irrumpió en el Hospital Regional Oluta-Acayucan, donde se hicieron pasar por médicos para rematar a dos hombres y una niña de 10 años que minutos antes habían sido baleados.
Los hechos fueron en la zona conocida como Barrio Nuevo, en el municipio de Acayucan, donde los heridos fueron trasladados al hospital, sin embargo, al lugar llegaron personas vestidas con batas y cubrebocas, pero que portaban armas, por lo que el personal del hospital se resguardó en otra área para evitar ser víctima de éstos.
Luego del ajusticiamiento en el hospital, al lugar llegaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina y Policía Estatal. Como casi siempre llegaron únicamente a enterarse de los acontecimientos.
Lo anterior viene al caso porque hace unos días gobernadores de los Estado de México, Guerrero, Michoacán y Morelos, conformaron una reunión en territorio mexiquense, la cual fue pomposamente llamada “Primera Mesa Interestatal de Construcción de Paz”, donde acordaron establecer de manera urgente el nuevo Centro Coordinador de Operaciones Interestatales para la Región de Tierra Caliente, con lo cual reforzarán la seguridad en las comunidades colindantes, para lo que decidieron implementar de forma conjunta cinco ejes operativos conjuntos: seguridad en carreteras, combate a la extorsión, a la tala clandestina, y el fortalecimiento de las capacidades de comunicación e inteligencia.
Qué pudieron haber acordado esos cuatro gobernantes después de la evidencia de delitos como la extorsión, en las mismas filas de las policías estatales y municipales de esos cuatro estados, se sabe quiénes son los que cobran el “derecho de piso” y nada hacen al respecto, porque no hay voluntad política en esos gobiernos; en el Estado de México no fue nada nuevo lo sucedido en Texcaltitlan y tampoco se ignora que todo el sur del estado es operado por el crimen organizado.
Delfina Gómez Álvarez, gobernadora en el Estado de México, escribió en sus redes sociales que confía en que la cooperación entre autoridades, les permitirá dar pasos significativos hacia la promoción de la paz y el bienestar.
La paz no se promueve gobernadora, se conquista cuando se tiene el monopolio de la violencia institucional.
En Toluca ha sido más que evidente la presencia del crimen organizado, la extorsión a los polleros puso en evidencia la indiferencia de las autoridades ante las acciones del crimen organizado.
Por otra parte, del primero al nueve de enero se registraron al menos 55 homicidios dolosos en el Estado de México, siendo el octavo día el más cruento, con 13 víctimas documentadas; en promedio, la entidad registró seis por día. En comparación con los dos años anteriores, 2024 igualó en cifras absolutas a 2023 y redujo 12 por ciento en relación con 2022, según los datos contenidos en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
El Reporte Diario de Homicidios Dolosos que elabora la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, con base en los reportes preliminares de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, indicó que en los primeros días de 2024, esta entidad sumó al menos 55 víctimas, cuyo día más violento fue el 8 de enero, con 13 víctimas.
Esperemos que la pomposamente llamada “Primera Mesa Interestatal de Construcción de Paz”, no quede solamente en una más de las reuniones de seguridad que se llevan a cabo entre gobernadores; urgen resultados en materia de seguridad, tanto en el Estado de México, como en muchos estados de la república mexicana.
