Ciudad de México.- La renuncia de Carlos Urzúa a la titularidad de la Secretaría de Hacienda y Crédito (SHyCP) es lamentable, a la vez de convertirse en un llamado de alerta para reencauzar la política económica del país, que a todas luces descalificamos la mayoría de los actores económicos involucrados en el desarrollo y crecimiento económico.
De esta manera evaluó Jesús Padilla Zenteno, presidente de COPARMEX CDMX, el anuncio dado este martes por Urzúa, quien dijo haber asumido la decisión porque se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento.
Lamentamos que el Secretario de Hacienda tenga que tomar esta decisión, pero apreciamos que sea en este momento y no después, expresó Padilla Zenteno, a la vez de insistir en que el sentido de la renuncia es sólo la confirmación de los argumentos que desde el sector empresarial hemos venido señalando.
De acuerdo con Padilla Zenteno, sin duda alguna hay elementos que soportan todavía la actividad económica, por la decisión del Gobierno Federal de no ir al dispendio. No hay un endeudamiento, se han cuidado variables como la inflación y el tipo de cambio, “pero esto puede ser un tema transitorio y se podría estar complicando la economía en futuros años”.
Finalmente agregó que la ruta de México en materia económica, sin duda alguna nos puede llevar a una recesión, porque de acuerdo con las expectativas de la COPARMEX CDMX vamos a crecer a un ritmo inferior al 1 por ciento.
En conferencia de prensa, Jesús Padilla Zenteno dijo que para poder generar un círculo virtuoso de inversión, producción, crecimiento económico y bienestar social, los empresarios “necesitamos acciones, mensajes y decisiones que generen confianza y certidumbre a la inversión”.
Tras reiterar el compromiso empresarial con la creación de empleo, que en mayo de este año se recuperó hasta alcanzar y superar la cifra de los primeros cuatro meses con 21 mil 197 nuevos registros en el IMSS —para llegar a 41 mil 399 nuevos trabajadores asegurados en el año—, Padilla expresó que “hasta hoy la única forma de generar riqueza es a través de la empresa”.
Y la empresa, destacó, necesita de la certidumbre que le pueden dar la seguridad jurídica y la seguridad pública, aspectos hasta el momento, desatendidos, porque en el caso de la inseguridad pública padecida por la sociedad, “no se cancela ni por decreto ni por buenos deseos”.
El dirigente de los empresarios de la Ciudad de México fue enfático al señalar cómo se percibe la impunidad en el ambiente del país, que impide detener a los delincuentes porque hoy sólo existe un presunto culpable de esa impunidad, como cortina de humo en el caso de Odebretch y su relación con Pemex, lo cual es una invitación abierta a continuar delinquiendo.
Observó cómo la mala implementación del Nuevo Sistema Penal Adversarial o Acusatorio, con el cual se pretendía desahogar los tribunales, hacer la justicia más expedita y dejar de violentar los derechos humanos, se ha convertido “en la llave de la puerta giratoria” por donde escapan la mayoría de los delincuentes al invocar el debido proceso, debido a la falta de capacitación de los policías, peritos y agentes del Ministerio Público, además de los jueces y magistrados.