Con el propósito de garantizar la inocuidad del pan que expenden las panificadoras en la Ciudad de México, la Secretaría de Salud, local, en colaboración con la Cámara Nacional de la Industria Panificadora, realiza visitas de verificación sanitaria para identifican riesgos específicos y tomar las medidas sanitarias correspondientes
A través de la Agencia de Protección de Riesgos Sanitarios se realizaron 116 visitas de verificación a establecimientos y en 96 aplicó sanciones de amonestación y apercibimiento, exhortándoles a corregir las irregularidades detectadas.
El Sistema de Análisis de Riesgos y Puntos Críticos de Control (Sistema HACCP), los verificadores supervisan el correcto almacenamiento de agentes de limpieza, químicos y sustancias tóxicas; que los equipos de refrigeración se mantengan a una temperatura máxima de 7° C, que permita la congelación del producto; que el equipo, utensilios y materiales en general sean inocuos y resistentes a la corrosión
Personal especializado constata que la materia prima y el producto terminado no estén en riesgo de contaminarse, que el agua para su elaboración sea potable; el drenaje cuente con una protección para evitar la fauna nociva del alcantarillado o áreas externas, y que no exista evidencia de plagas.
El personal de la Sedesa verifica que los establecimientos cuenten con su registro de limpieza, desinfección, control y erradicación de plagas, incluyendo los vehículos para acarreo y reparto.
Todas estas medidas se apegan al cumplimiento de la Norma NOM-251-SSA1-2009 que establece las condiciones sanitarias en las que se deben encontrar los establecimientos dedicados a la elaboración de alimentos, en este caso el pan.