Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México, que conduce Manuel Aparicio,
Dijo el presidente en una gira por el estado de Veracruz, “vamos a reiniciar clases, va a iniciar el nuevo ciclo escolar a finales de agosto, llueva, truene o relampaguee”; esta declaración la hace López Obrador no obstante que se padece la tercera ola de Covid-19 y ante la protesta de maestros y la negativa por parte de padres de familia, a que sus hijos acudan a clases presenciales.
La pregunta obligada es si por parte de la Secretaría de Educación Pública ya hicieron la tarea en cuanto a la revisión de las escuelas, ya que casi llega a 20 meses que están esos planteles educativos en completo abandono, muchos de las cuales sufrieron robos, están dañados y no en pocos casos, no cuentan con luz eléctrica, tampoco teléfonos y como consecuencia, tampoco tienen Internet.
Hemos estado pendientes de la información que se ha generado con motivo del regreso a clases presenciales, por ejemplo en Toluca, la Coordinadora de Escuelas Democráticas del Estado de México, realizó una manifestación en la que, más de dos mil padres de familia y maestros, pedían la vacunación de los niños para poder regresar a clases presenciales, pero también, solicitaron que las autoridades educativas a cuyo frente se encuentra un individuo de nombre Gerardo Monroy Serrano, hicieran una revisión de las instalaciones de cada una de las escuelas para que estuvieran en condiciones óptimas para el regreso a clases.
Hasta el momento, ninguna escuela de la zona oriente del Estado de México ha recibido a los funcionarios que se encargarán de esa revisión, y solamente hicieron entrega de un vergonzoso kit para cada escuela, el cual que no servía ni para sanitizar un salón de clases, mucho menos para toda la escuela.
La maestra Coralia Villegas, dirigente de la Coordinadora de Escuelas Democráticas del estado de México, dijo que ellos, los maestros, no tienen inconveniente en regresar a clases, que los maestros son un gremio que se caracteriza por ser hombres y mujeres trabajadores, pero que se antepone a ese regreso a clases la petición de las madres y padres de familia, que exigen la vacunación de sus hijos.
México que tiene la cuarta cifra más alta de muertes por COVI-19 en el mundo, con más de 238,000 decesos y casi 2.75 millones de casos, no tiene clases presenciales a nivel nacional desde marzo de 2020; para reabrir las aulas, el gobierno vacunó en abril y mayo con la vacuna china de CanSino, de una dosis, a más de 2.7 millones de trabajadores educativos nacionales de un universo total de 3.1 millones.
Pero entidades que emprendieron programas piloto, como la Ciudad de México y Campeche, cerraron las escuelas por rebrotes, mientras que algunos maestros se han opuesto por considerar que la vacuna de China no los protege de manera suficiente.
En otros casos como en el Estado de México, en la Preparatoria Anexa a la Escuela Normal de Chalco, se contagió la directora de nombre Edith y cerraron esa escuela, Edith sigue en recuperación y el plantel fue cerrado. El estado de México no informó de este caso pretendiendo, con la simulación, falsas condiciones en cuanto a salud pública.
El presidente López Obrador ha considerado que existen “pequeños rebrotes”, no obstante que el país lleva días consecutivos con más de 15,000 casos diarios y hay nueve entidades en alerta amarilla por una ocupación hospitalaria mayor al 50 por ciento.
El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) se reporta sin disponibilidad de camas por la llegada de pacientes contagiados de COVID-19 de la tercera ola de contagios; a las afueras del hospital, ubicado sobre Calzada de Tlalpan, fueron colocados carteles con la leyenda “Hospital sin Disponibilidad”. Cabe señalar que el INER fue reconvertido a hospital Covid ante el incremento de casos de contagios.
Pero bueno, ya se dijo que “llueva, truene o relampaguee”, el regreso a clases es un hecho.