Laura Castillo García
Estamos a punto de consumir el primer trimestre del año y la única noticia “positiva” que en más de tres años ha dado el gobierno federal es la inauguración del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el cual -según la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum-, “es la esencia de la 4T”.
Por primera vez estoy de acuerdo con la doctora venida a funcionaria, el AIFA es la esencia de la 4t; pero, no por las razones que esgrimió en su discurso inaugural de la obra emblemática de López Obrador, sino porque retrata de cuerpo entero el mal gobierno de la 4T.
No cabe duda que la inauguración del AIFA tuvo un objetivo esencialmente electorero para que la gente vuelva a creer en el presidente y vote por el “sí” en la consulta de revocación de mandato que se realizará el próximo 10 de abril. Seguramente los de la 4T ya empezaron a preocuparse por la caída en la aceptación del presidente: y no es para menos porque de 66 por ciento de aprobación ciudadana que tenía en 2018 pasó a 54 por ciento en 2022 y los porcentajes de rechazo pasaron de 18 por ciento en 2018 a un alarmante 43 por ciento en 2022.
Esos datos explican por qué el presidente López Obrador se aventuró a inaugurar “un aeropuerto que todavía se encuentra en obra negra, con pistas inconclusas y locales comerciales cerrados y otros vacíos”, como aseguró la senadora panista Kenia López Rabadán, quien horas después de la “fiesta morenista” fue a conocer el AIFA y se encontró con lo descrito anteriormente, lo cual coincide con la investigación del diario La Razón que estima que el aeropuerto está al 61 por ciento de construcción.
Aun más. La corrupción en el AIFA salió a la luz en una investigación realizada por “Mexicanos Contra la Corrupción y la impunidad”: los altos mandos del Ejército seleccionaron “por dedazo” a las empresas contratadas y el 100 por ciento de las empresas contratadas no pasaron por un proceso de licitación y todas eran de reciente creación y sin experiencia. Tal vez por eso las contrataron, pues así pudieron manejar con opacidad el presupuesto, al grado que la Sedena ocultó cómo gastó 3 de cada 4 pesos; además, las adjudicaciones multimillonarias se hicieron a empresarios vinculados a factureros y contratistas con antecedentes de corrupción.
Al respecto, el periódico Reforma publicó, el mero día de la inauguración, que “una filial de la empresa francesa Alstef Automation ganó, tres semanas después de constituirse, un contrato de mil 475 millones de pesos para suministrar el sistema de manejo de equipaje en el AIFA.
Es más, las investigaciones en el Registro Público que realizó Mexicanos contra la corrupción e impunidad, arrojaron que casi todas las empresas que fueron contratadas obtuvieron miles de millones de pesos por parte de la empresa militar Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, S.A. de C.V. Esas adjudicaciones directas hablan de la corrupción que hubo en los dineros públicos que se emplearon en la construcción del AIFA. ¿Dónde quedó la lucha contra la corrupción A´pa? ¿Acaso la persecución POR corrupción solo es para los que no comulgan con la 4T y está permitida en militantes y simpatizantes de la misma y simpatizantes? Así parece.
Una vez más, López Obrador y Claudia Sheinbaum no tuvieron empacho en utilizar a gente del pueblo para apuntalar su discurso populista de “primero los pobres” y ocultar que todavía no estaban abiertos los locales que ocuparán grandes marcas, franquicias nacionales e internacionales, como: Urbanus, Starbucks, Krispy Kreme, Librería Educal del Fondo de Cultura Económica (FCE), Muestra Artesanal, Pastes Kikos, Xóchitl.mx, que sí pueden pagar mensualmente las costosas rentas que se les impusieron.
Para fingir que el pueblo sería beneficiado por el AIFA, los organizadores de la “fiesta” permitieron la instalación de un tianguis en el estacionamiento y en los pasillos del aeropuerto: ahí vimos a la señora de las tlayudas, que formó parte del mar de vendedores que ofrecieron: gorras de Morena, tazas con foto de Andrés Manuel y muñecos de éste, entre otros.
Pero, lo que demuestra que no se trató de ningún apoyo al pueblo, fue que todo el comercio ambulante desapareció por completo al día siguiente, lo que permitió ver que la mayoría de los locales comerciales están cerrados o en remodelación. Si para la 4T “primero los pobres”, ¿por qué no les ofrecieron locales a precios que ellos pudieran pagar? Eso, en verdad demostraría la buena voluntad del presidente López de ayudar a los pobres; pero no, primero los utilizaron y luego los corrieron.
Es más, todavía podrían ofrecer locales con rentas baratas a los comerciantes menos favorecidos, al fin y al cabo la mayoría aun no se han rentado. Francamente, dudo que se haga.
¡Ay AMLO no estás haciendo nada para el pueblo y eso te lo aplaude a rabiar el más grande burgués de México!
Aunque el discurso inaugural de Sheinbaum se esmeró en decir que esa obra era para beneficio del pueblo de México, cuando lo leemos y analizamos detenidamente nos damos cuenta que realmente esa es una obra para que los ricachos acumulen más riqueza y solo dejen caer migajas a los más necesitados del Valle de México.
Sin ocultar su contento, el empresario más rico del país, Carlos Slim Helú, se mostró complacido con la construcción de esas instalaciones que fueron hechas con dinero público, pero que tanto el como los de su clase, aprovecharán para que los grandes multimillonarios mexicanos y extranjeros sigan incrementando sus riquezas y, claro, todo a costillas del pueblo que paga sus impuestos.
Para muestra dos botones: 1) la aerolínea que inauguró las pistas fue Viva Aerobús, propiedad del grupo IAMSA que tiene su base de operaciones en el Aeropuerto Internacional de Monterrey, ciudad de la que han salido empresarios bastante adinerados.
2) El hotel que construyó -con dinero de nuestros impuestos- la empresa militar Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, S.A. de C.V., será concesionado a la empresa estadounidense Holiday Inn, quien recibirá ingresos de 270 habitaciones y, por tanto, esa empresa estadounidense gozará de las ganancias que ahí se generen.
Aunque ciertamente se generarán empleos directos e indirectos para beneficio de los habitantes del Valle de México, serán puras migajas que caigan de la mesa de los ricachones protegidos por AMLO y su 4T.