Comentario Político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México que conduce Manuel Aparicio.
El 5 de noviembre de 2020, en su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador, nuevamente se refería a la corrupción, con motivo de un video que se dio a conocer donde su hermano Pio recibía dinero: “No voy a proteger a un corrupto. No voy a ser tapadera aunque sea de mi familia”, afirmó el presidente esa mañana, al referirse a la petición que hizo su hermano, Pío López Obrador, al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, para detener la investigación que estaba realizando el Instituto Nacional Electoral en su contra.
El presidente agregó que el principal problema de México es la corrupción e impunidad, por lo que no va a dar ni un paso atrás en la transformación del país.
Sin embargo se ve lenta la actuación del gobierno en la lucha contra la corrupción, cuando se trata de allegados al ejecutivo.
La colaboración de 600 periodistas en la indagación que tiene origen en lo que llaman “Pandora Papers”, investigación en la que participan un promedio de 150 medios de comunicación, dejar ver los recursos económicos ocultos de políticos, empresarios, artistas y deportistas de élite, lo que la hace ver como la mayor colaboración periodística de la historia.
(Imagen El Cántaro Noticias)
Ahora esa pesquisa periodística, que traducida son los “Papeles de Pandora”, toca a las puertas de Palacio Nacional y pone en evidencia la fallida lucha contra la corrupción por parte de Andrés Manuel López Obrador, la reciente difusión de documentos, pone en evidencia a varios funcionarios muy cercanos al Presidente de México que evadieron impuestos.
Lamentable es que la información sobre la corrupción del actual gobierno tenga que venir de fuera, mientras que la Fiscalía General de la República, a cuyo frente se encuentra Alejandro Gertz Manero, se dedica a perseguir científicos; entre los colaboradores y ex miembros del gabinete de López Obrador que usaron paraísos fiscales, están el secretario de Comunicaciones, Jorge Arganis; el ex consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer; el senador morenista Armando Guadiana y la pareja de Manuel Bartlett, Julia Abdala. Más lamentable resulta que Andrés Manuel, al conocer la información sobre sus colaboradores, diga que otros robaron más.
Estos funcionarios ponen en evidencia las palabras que permanentemente dice el Ejecutivo federal en el sentido de “que ya no hay corrupción”, “que se está barriendo la escalera, de arriba hacia abajo”, “que todo lo malo son de los neoliberales y los conservadores”, “que en Morena hay ‘honestidad valiente’… lo que se aprecia es que la corrupción solamente cambio de nombre, en otro momentos se llamó Enrique Peña Nieto y ahora son quienes detentan el poder.
Seguramente la investigación que realice la Fiscalía de Gertz Manero quedara en meras intenciones, luego de escuchar a López Obrador decir que otros robaron más; históricamente se repite aquella sentencia “Para los amigos, gracia, y para los enemigos, la ley.
Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de la corrupción que representa la Cuarta Transformación.