Por: Judith Díaz Corona.
SIMEX.- “… Dirigir la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión compuesta por monstruos de la comunicación, no es nada fácil. Son personas admiradas por sus radioescuchas, televidentes o lectores. No es nada fácil porque hay muchas egolatrías; y, esto forma parte de las pasiones humanas que se da en todos los contextos y en todas las profesiones…” sostuvo Vladimir Galeana en entrevista en Radio Expresión México.
Al concluir su periodo como presidente de la ANPERT, en charla con Manuel Aparicio, recordó: “hace doce años nos dimos la oportunidad de buscar derroteros comunes creando la Academia; una institución para defender los intereses de sus integrantes, porque nuestra carrera es incierta, pero sobre todo plagada de desasosiego, porque no cuentas con seguridad social, ni préstamos, no accedes a un proyecto para el retiro, no hay planes de jubilación, no tienes seguridad social, ni una casa, lo que hace que la profesión del periodismo sea la más desprotegida”.
Vladimir Galeana de manera breve detalló: entendimos que tendríamos que hacer algo para que en esta apertura que se da en las instituciones pudiéramos participar, y así logramos establecer algunos convenios de colaboración, como con el seguro social para tener servicios médicos, a través del Seguro facultativo. Lo conseguimos a través de un pago mensual o una cuota anual que sale más barato que cualquier seguro que se pueda contratar. Con el Fondo para la vivienda, firmamos un convenio donde la Academia fuera el patrón sustituto y los compañeros aportaran sus cuotas al infonavit, para que al cabo de dos años de cotizar podamos ser susceptibles de crédito para obtener una vivienda.
En suma fueron 4 años de trabajo intenso y de lucha por conseguir algo para los periodistas a través de reuniones con políticos, gobernantes, funcionarios públicos diputados, senadores, líderes de partidos con quienes habitualmente convivíamos para platicar sobre sus planes de ahí surgía la empatía. 4 años para lograr que los compañeros acreditaran sus conocimientos para realizar su examen profesional y obtener su título.
Iniciamos el camino para que en la ciudad de México se reconozca a los periodistas como profesionales de alto riesgo, y que tienen que proteger; logramos un protocolo que se nos entrampó, con las aspiraciones bastardas de algunos que pretendían manejar presupuestos millonarios. Nuestra postura fue: sí a la ayuda, sí al poyo, sí a la solidaridad pero cero dinero. Porque de esta manera vamos a pervertir la búsqueda de mejoramiento a la atención para los periodistas caídos en desgracia y para aquellos que viven perseguidos, o que tienen que abandonar sus lugares de origen.
El ex presidente de la ANPERT. Subrayó: muchos piensan que el periodismo es una carrera donde se gana mucho dinero. Desde luego algunos ganan mucho, otros medianamente y la mayoría, muy poco. Recordó que los periodistas viejos, no tenían ni donde dormir, “algunos salían a trabajar pero regresaban a dormir al albergue, por no contar con una casa y a veces ni una familia porque cuando te vuelves viejo todos se alejan”.
Por último, agradeció a Enrique Lazcano, quien junto con otros periodistas concibieron el proyecto de la Academia. También a Leopoldo Mendívil quien es una institución periodística en este país y condujo muy bien la Academia y al nuevo presidente, Carlos Ramos Padilla conductor en Radio y TV mexiquense, y televisión educativa, a quien le deseó el mejor de los éxitos en los 4 años que habrá de conducir los destinos de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión.
