Capitán Antonio Rodríguez Fritz
La tercerización, en inglés conocida como outsourcing, es un cáncer diseñado básicamente para evitar que los sindicatos puedan organizar a todos los trabajadores de una empresa y con ello tener mas fuerza para negociar condiciones dignas, pero adicionalmente en México ha tenido un elemento más, es usado como herramienta para defraudar derechos laborales como el reparto de utilidades e igualmente, junto con la industria facturera, para defraudar al sistema de seguridad social y a la hacienda pública.
La reciente ley, mal llamada del outsourcing, desafortunadamente se preocupó mas en evitar la defraudación fiscal que en mejorar los derechos de los trabajadores.
Quien no lo crea, debe de saber que deja las puertas abiertas para que se creen nuevas empresas, de lo que le llamarán trabajadores especializados, por ejemplo los gerentes, profesionistas, etc.
Es decir que en la práctica veremos la creación, nuevamente de otra multitud de empresas para sustituir las anteriores, pero que tendrán el mismo fin, negarle derechos a los trabajadores, evitar que tengan reparto de utilidades justos, que no se puedan sindicalizar todos los trabajadores en una misma organización sindical, etcétera.
Pero no sólo las malas empresas están afilándose los dientes, los pseudo sindicatos, o sindicatos de protección patronal, ya están también adaptándose a la nueva realidad, organizando falsas elecciones y procesos de legitimación de contratos colectivos para que, a pesar del tratado, sobrevivan los esquemas corruptos de los contratos de protección
Afortunadamente el tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá incluye mecanismos para presentar quejas cuando se violenta la libertad sindical, que es un derecho humano, y recientemente fue presentada la primera queja, por la Confederación de los Trabajadores de los Estados Unidos AFL-CIO.
La queja ha causado incomodidad, por supuesto, pero ha causado incomodidad a quien no logró demostrar un proceso electoral honesto. El mecanismo de quejas no es una intromisión, si no mas bien una fórmula para evitar que las empresas honestas, que si cumplen con las reglas del juego, se vean perjudicadas por las prácticas indebidas de las empresas corruptas, es decir aquellas que generan una competencia desleal, conocido en inglés como social dumping.
(Imagen Juárez Hoy)
Esperemos que los sindicatos Mexicanos cada vez mas se acerquen a sus contrapartes de Estados Unidos y de Canadá.
La implementación de condiciones laborales dignas y seguras, con contratos colectivos adecuados a cada industria y sobre todo el respeto irrestricto a la libertad sindical no es un lujo, es una necesidad para acabar con la corrupción y los abusos de los malos patrones, si logramos controlarlos, los buenos empresarios y los trabajadores, es decir, la mayor parte de la población de nuestro país, serán los grandes ganadores.
Estimado Manuel y gentil Auditorio, a defender nuestros derechos para tener un país mas justo y que tengan un magnífico día