Capitán Antonio Rodríguez Fritz
Algunas personas se han extrañado que el Señor Presidente de México haya informado el día de ayer su determinación de otorgar empresas públicas de transporte e infraestructura a los militares, empresas que por cierto son constituidas primordialmente con el impuesto de los Ciudadanos Civiles.
En realidad, nadie debe de sorprenderse, estas políticas han sido ya implementadas en otros países. Por ejemplo en Argentina, Chile, Paraguay y algunos otros.
Lo que debería de sorprender, es que esa militarización de los bienes públicos siempre se ha efectuado por gobiernos dictatoriales, usualmente dirigidos por militares pero en ocasiones por civiles que, efímeramente creyeron que mantendrían el poder otorgando esas dádivas.
(Fotografía Formato 7)
El gobierno de México, por tanto, no está innovando, por el contrario, se están utilizando mecanismos propagandísticos del futuro, aparentemente basados en las enseñanzas de Goebbels, para implementar consorcios mercantiles militares del pasado.
Es justo recordar que muchas de las experiencias desastrosas, como las que están implementando ahora México en materia de militarización de la economía, han generado y siguen generando mecanismos de corrupción, no sólo por el reciente caso que involucra a 800 militares en un país sudamericano, si no por los incontables casos que la gentil audiencia puede fácilmente buscar en internet.
Según anunció recientemente el gobierno, la militarización de sectores de la industria del transporte e infraestructura, tendría como principal objetivo, que en el futuro, cito textualmente “no haya la tentación de privatizarla“, esto indica que otras empresas públicas, como la CFE, Pemex, etcétera también pueden sufrir el mismo futuro sombrío, aunque por supuesto por ahora dirán que no es verdad.
Después de todo, no importa que se viole la Constitución, porque ya parece que vivimos un estado de excepción.
Manuel y estimados radio escuchas, que tengan una feliz navidad resguardados en la seguridad de sus casas.