Por: Homero Aguirre Enríquez
El anuncio del regreso a clases en agosto, hecho por la secretaría de Educación, Delfina Gómez, es una maniobra poco responsable, que pone en riesgo la vida de muchos mexicanos y ha generado justificadas protestas de organizaciones estudiantiles, magisteriales y muchos padres de familia, preocupados por la salud y la vida de millones de niños y jóvenes.
No creo que exista ningún mexicano que no desee el regreso a la normalidad y particularmente el retorno de millones de estudiantes a las aulas. La discusión, por lo tanto no se encuentra en ese punto, todos queremos el regreso a clases. Pero, ¿cómo regresar a las aulas de manera segura en México, el país ubicado en el tercer lugar de muertos por COVID de todo el mundo y con un gobierno que ha cometido yerros colosales en el combate a la pandemia?
El gobierno federal pretende convencer a la población con el método que ha usado para responder todas las interrogantes: recurrir a la palabra presidencial sin mayor argumento ni lógica científica o de otra naturaleza. Simplemente, afirmar que “ya hay condiciones para regresar a clases”, como dijo el 6 de abril.
Pero en el mundo hay serias advertencias científicas sobre los grandes riesgos que acarrea regresar a clases sin haber domado a la pandemia. Por ejemplo, la prestigiosa revista médica The Lancet publicó un artículo en donde advierte que la reapertura de las escuelas sin una sólida mitigación del Covid implica el riesgo de acelerar la pandemia: “Si bien volver a la escuela lo antes posible es imperativo para la educación, el desarrollo social y el bienestar mental y físico de los niños, no se ha hecho lo suficiente para hacer que las escuelas sean más seguras para los estudiantes y el personal. Sin mitigaciones adicionales, es probable que aumente la transmisión, esta vez con variantes más infecciosas y posiblemente más virulentas, lo que resulta en más cierres, cierres de escuelas y absentismo”, y predice, para Inglaterra: “Los datos de modelado de la Universidad de Warwick y el Imperial College de Londres sugieren que se estiman al menos 30, 000 muertes más por COVID-19 bajo los escenarios de reapertura propuestos”.
La revista hace una serie de recomendaciones para atenuar el riesgo del regreso a clases en Inglaterra, el lector juzgará si son de aplicación en nuestro país y si hay alguna pequeña mención, por parte de las autoridades mexicanas, a las medidas que piensan tomar en caso de empecinarse en decretar el regreso a clases. Cito algunas recomendaciones del artículo de The Lancet, realizadas al gobierno británico:
1.- “Los niños deben viajar a la escuela en grupos familiares o en pequeñas burbujas sociales fijas”. Piense el lector en el metro, o en el transporte público donde viaja hacinada la gente pobre de México para llevar a sus niños a la escuela, y se dará cuenta que aquí, para millones de familias, es imposible aplicar tal medida.
2.- “Se debe minimizar la mezcla (de los niños y sus acompañantes) en las puertas… escalonar “horarios de apertura, cambios de clase y otras actividades que requieren el uso de espacios compartidos por grupos grandes”… “reducir el tamaño de los grupos para permitir el distanciamiento físico”. Las escenas de los niños y madres reunidos a la única puerta de las escuelas, es una escena cotidiana en nuestro país y no veo cómo la van a eliminar en México, si los horarios escolares están ligados a los horarios de los centros de trabajo de los padres; en cuanto a escalonar horarios y formar grupos pequeños, se requiere de una gran cantidad de personal adicional que seguramente no va a contratar la 4T, que se encuentra ahorrando todo lo que puede para gastarlo en las campañas electorales.
3.- “Pruebas rápidas dos veces por semana para todos los niños…”. México tiene uno de los índices más bajos de aplicación de pruebas para detectar Covid, el gobierno federal no gastará ni un peso en aplicar dos pruebas semanales a los estudiantes.
4.- “En toda la escuela se debe disponer de estaciones para lavarse las manos y desinfectantes de manos”… “pruebas de covid en aguas residuales”… ” Una buena ventilación es vital y se deben usar monitores de CO2 para medir la eficacia de la ventilación y equilibrarla con el confort térmico”..” El gobierno debe proporcionar regularmente máscaras, como se ha hecho en otros países. Las máscaras solo deben quitarse al aire libre o para comer”… ” Proteger y apoyar a los estudiantes vulnerables: las desigualdades socioeconómicas en la educación deben abordarse proporcionando un apoyo tecnológico, financiero y práctico adecuado para el aprendizaje remoto o por turnos cuando sea necesario. Debe haber disponibilidad de TI, wifi y espacio de estudio para todos, para respaldar los períodos durante los cuales los estudiantes deben ponerse en cuarentena o aislarse”. En muchas escuelas mexicanas no hay agua, ni sanitarios, mucho menos estaciones de desinfección masiva con gel y lavamanos, o monitores de CO2. Resolver esas carencias, al igual que dotar de máscaras a los estudiantes requeriría una gran inversión. Tan solo para dotar de lavamanos a 62, 629 escuelas, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria calcula una inversión de 10 mil 376 millones de pesos, cantidad que no está en los planes electorales de López Obrador.
Por lo tanto, tienen razón los muchachos organizados en la Federación Nacional de Estudiantes “Rafael Ramírez”, que se niegan a regresar a clases en esas condiciones y han iniciado un movimiento que exige vacunas para todos los estudiantes y para el 70% de la población antes del reinicio de clases; están en lo justo los maestros de la CNTE y todos los profesionistas que imparten clases y se niegan a regresar a clases presenciales en estas condiciones, así como todas las madres y padres de familia preocupados por lo más valioso que tienen, que es la vida de sus hijos. Invito a todos los mexicanos a exigir vacunación para todos y a protestar contra cualquier intento del Gobierno de poner en peligro la vida de los estudiantes y de otros mexicanos. El retorno a clases sin vacunar a la mayoría de los mexicanos es otra maniobra vil para captar simpatías a favor de Morena y su mal gobierno. No caigamos en esa trampa mortal.