Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México, que conduce Manuel Aparicio.
23 de octubre de 2023.
La Secretaría de Salud de México inició el pasado 15 de octubre la campaña de vacunación contra influenza y covid-19, correspondiente a la temporada invernal. La estrategia está dirigida a la población considerada vulnerable, como son los mayores de 60 años, las mujeres embarazadas, los pacientes con comorbilidades y el personal de salud. Según cifras oficiales, se aplicarán cerca de 54.6 millones de dosis.
Sin embargo en un recorrido que hice por diferentes centros de salud del Estado de México, se me informó que únicamente tenían vacunas para la Influenza, pregunté cuando iba a llegar la que es contra el Covid y me respondieron que no tenían fecha, pero que avisarían en cuanto la tuvieran.
López Obrador ha dicho que siempre ha sostenido que el que quiera comprar vacuna y se quiera aplicar cualquier vacuna lo puede hacer. Dijo “Nosotros no vamos a impedir que se use una medicina, una vacuna, de ninguna manera, pero sí es una responsabilidad del Estado garantizar el derecho a la salud… sí se podría importar, sí. Yo no le veo problema para nada, nosotros nada más lo que tenemos es garantizarle a quien no tiene posibilidad para comprar medicinas, para comprar vacunas”.
Desde que se inició la Pandemia es más que evidente el fracaso, producto de su ineptitud del actual gobierno en materia de salud; María Elena Álvarez-Buylla directora general del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), dijo que la vacuna mexicana “Patria”, contra el virus del SARS-CoV-2, cumple con criterios de la Organización Mundial de la Salud, sin embargo lo que se ha informado, es que las vacunas que se aplicarán serán la cubana Abdala y rusa Sputnik, para inmunizar a 24.5 millones de personas que pertenecen a los cuatro grupos de población de mayor riesgo.
Hay que recordar que en la fase más intensa de la Pandemia se prohibió la importación de vacunas, con el absurdo argumento de que los neoliberales y conservadores corruptos, querían los permisos para hacer negocio, sin embargo, el gobierno no cumplió en su totalidad con el derecho a la salud de los mexicanos, al vacunarlos con dos vacunas que no tienen reconocimiento de la Organización Mundial de la Salud, como son la Sputnik y Abdala.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos, la inmunización contra el virus debe ser con vacunas bivalentes, fármacos actualizados que “contienen dos componentes de ARN mensajero del virus del SARS-CoV-2, uno de la cepa original del SARS-CoV-2 y el otro en común entre los linajes BA.4 y BA.5 de la variante ómicron del SARS-CoV-2”. Los biológicos que se aplicarán en México, Sputnik y Abdala, son monovalentes.
Diría mi abuelo Camilo: “Ante este panorama, es mejor encomendarse a Dios”.
