Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México que conduce Manuel Aparicio.
El pasado día lunes 30 de agosto llovió, tronó y el alumno no acudió a su clase como se esperaba; sí, la gran mayoría de los padres de familia privilegiaron la salud de sus hijos a enviarlos a la escuela a correr el riesgo de contagio de Covid.
En lo personal y en este espacio lo he comentado con argumentos derivados del sentir de los padres de familia, he estado en contra de las clases presenciales porque creo firmemente, que un año de estudios de cualquier manera se recupera, pero la vida de un niño no.
Un antecedente que quedará para la historia de las necedades gubernamentales es aquella carta responsiva, donde la autoridad educativa dejaba toda responsabilidad de la salud a los padres de familia, sí, aquella carta que luego quedó huérfana al ser desconocida por las mismas autoridades que la emitieron.
El pasado lunes me día la tarea de recorrer escuelas de la zona oriente del Estado de México, me encontré con escuelas que no tenían sanitizante, que no tenían gel para las manos de los niños en las entradas a los centros escolares, vi a niños que traían su cubre boca tan grande que les tapaba hasta la vista y algunos no llevaban, los padres de familia que llevaron a sus hijos los veían entrar a las escuelas y era evidente su preocupación, no faltó alguna mamá que oraba por la salud de su niño.
Muy pocos niños acudieron a clases.
Me voy a reservar nombres de escuelas para evitar represalias a los maestros, pero también me encontré con carteles donde se invitaba a denunciar a los maestros de las escuelas que pidieran cooperación, y para ello, había un número telefónico donde les recibirían la denuncia.
Una maestra me dijo con la amargura reflejada en su rostro:
“Señor, siempre se ha pedido cooperación para el pago del conserje, en ocasiones vive con su familia en el área escolar y se encarga también de cuidarla, a él no le paga el gobierno, nosotras tuvimos que comprar paquetes de cubre boca para los niños que no traen, pero son sencillos, la autoridad no nos dio ni cloro, ni jabón para la higiene de los salones, ni gel para las manos de los niños, ni cubre boca; para el pago del conserje los maestros tenemos que hacer una coperacha para darle algo de dinero…
Bueno, el gobierno ni siquiera se responsabilizó de entregar los suficientes libros de texto para la educación de los niños, alguna maestra me comentó que le habían entregado solamente el 30 por ciento de los libros que necesitaba para sus alumnos.
Me quedó claro que el gobierno con carta o sin carta responsiva, dejaron toda la responsabilidad de los niños a los padres de familia y claro, a los maestros, el gobierno se concreto a decir que llueva truene o relampaguee las clases se inician el 30 de agosto, pero dejaron a la deriva el precepto constitucional de la gratuidad de la educación para los mexicanos.
