UN PASO MÁS HACIA LA BRUTALIDAD DE LA MILITARIZACIÓN EN MÉXICO
POSICIONAMIENTO DE LAS ORGANIZACIONES CIVILES DEL SECTOR MARÍTIMO EN
CONTRA DE LA MILITARIZACIÓN DE LOS PUERTOS Y LA MARINA MERCANTE
La Cámara de Diputados aprobó la Iniciativa de Ley para militarizar los puertos comerciales, su administración, la realización de todo tipo de obras marítimas, la regulación de la Marina Mercante, el Registro Público Marítimo y la Educación Náutica Mercante, entre otros.
En síntesis, todas estas actividades propias del comercio marítimo, estarán ahora a cargo de militares de la Secretaría de Marina-Armada de México y se realizarán con criterios castrenses.
Se han impuesto ambiciones mezquinas de un grupo de Almirantes y Oficiales Navales de la Armada de México, bajo el sofisma de que los miembros de la Armada de México dejan de ser militares por el solo hecho de desempeñar un cargo en la Secretaría de Marina, al tener esta dependencia atribuciones también de carácter civil.
Este sofisma se confirma con lo dispuesto en el propio artículo 1 del Reglamento Interior de la Secretaría de Marina, al disponer que la Secretaría de Marina tiene a su cargo atribuciones conferidas por la Ley Orgánica de la Armada de México, es decir, las dos entidades están entrelazadas y conformadas por militares en activos sujetos a sus propios ordenamientos castrenses.
Esta aprobación viola el artículo 129 Constitucional, como resultado de la complicidad de los Diputados de MORENA de la 4T, que con falsos argumentos aprobaron este nefasto cambio legislativo que tendrá consecuencias negativas para el comercio marítimo de México.
(Fotografía Cuartoscuro)
La vasta mayoría de los legisladores de MORENA y sus aliados, votaron por consigna y sin mayor razonamiento de los argumentos expresados por los especialistas en el supuesto Parlamento Abierto realizado sobre estos temas, mostrando que no existe una auténtica división de poderes.
Se trata de un avasallamiento de la actividad marítima civil que abarca también todo el sistema 8portuario nacional y que sigue la ruta de las nefastas experiencias que en esta materia ya se aplicaron en Venezuela, con muy graves afectaciones a dichas actividades productivas.
Para agravar esta situación, la ineptitud de la Secretaría de Marina en la conducción del Sector Marítimo de nuestro país durante los 36 años (de 1940-1976) en que la Secretaría de Marina Armada de México tuvo bajo su competencia todas las atribuciones relativas a los puertos y a la Marina Mercante, fue evidente y tuvo resultados funestos, ya que los puertos existentes desde el “Porfiriato” se volvieron obsoletos, debido a que con excepción de dos puertos nuevos sin mayor trascendencia (Yukalpetén y Pichilingue) no se construyeron otros ni se modernizaron como lo requería la economía nacional, creándose grandes cuellos de botella que causaron un gran daño el desarrollo del comercio exterior de nuestro país.
Con esta reforma legislativa estamos incurriendo en los mismos errores del pasado, ya que quien no aprende de sus errores está condenado a repetirlos. Además, al segmentar el transporte por agua, de los demás modos de transporte sin duda se afectará la
eficiencia de las cadenas logísticas que deben de operar dentro de un Sistema Integral de Transportes (marítimo, terrestre y aéreo), se elevarán los costos y se inhibirá la inversión privada en el sector.
Esta reforma va en sentido contrario a como operan los países desarrollados con gran tradición marítima, así como a las políticas seguidas por nuestros principales socios comerciales y a los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Por otra parte, infundadamente se argumenta que dada la próxima Auditoría del 2023 de la
Organización Marítima Internacional (OMI) a nuestro país, estamos en riesgo de no cumplir con su normatividad si México no tiene una Autoridad Marítima unificada, lo cual es otra de sus patrañas, ya que desde 2010 la Autoridad Marítima a cargo de la SCT aprobó satisfactoriamente una Auditoria similar, estando las responsabilidades de la Autoridad Marítima en diferentes dependencias, incluyendo la Secretaría de Marina, al ser éstas complementarias.
Ante estas circunstancias, los marinos mercantes agrupados en el , continuaremos demandando en el Senado de la República que nuestros argumentos sean escuchados y debidamente valorados, confiando en que la investidura de los Ciudadanos Senadores no será servil como la adoptada en la Cámara de Diputados por los integrantes de Morena y sus satélites, para lograr que la referida Iniciativa de Ley sea desechada.
Consejo Nacional de Asociaciones y Sindicatos Marítimos (CONASM)
Integrado por 18 organizaciones civiles de la Marina Mercante Nacional
