Comentario político del periodista Raymundo Medellín para el programa radiofónico “Hablando Claro” de Radio Expresión México, que conduce Manuel Aparicio.
01 de agosto de 2022.
Hace unos días, platicando con una amiga reportera, Gloria Aguilar Mateos, ella me preguntaba sobre las fortalezas y las debilidades de MORENA, le contesté que entre las fortalezas estaba el poder que les da el gobierno que tienen, respecto a las debilidades, le refería que se trataba de un partido joven, que por lo tanto no contaba con una gran estructura, le hablé también de los vicios de muchos de los integrantes de MORENA, vicios que llegaron con la aceptación de políticos corruptos venidos de otros partidos, principalmente del PRI.
Un partido político por naturaleza no se puede construir en de la noche a la mañana, se requiere de período de tiempo para hacer valer las reglas, los estatutos que los rigen, debe haber adoctrinamiento y los cuadros deben conformarse con el respeto que requieren los liderazgos.
Este fin semana quedó de manifiesto lo mucho que le falta a MORENA para ser un partido auténtico, que responda a su gente, a su militancia; las dirigencias nacionales y estatales deben dejar atrás el que, con solamente la figura de Andrés Manuel se gana.
Hablar de determinado lugar donde se produjo la violencia, sería dejar a un lado los muchos lugares donde se provocó, estas elecciones de consejeros quedaron marcadas por el acarreo y compra de votos de los mismos morenistas que ejercen el poder, alcaldes y gobernadores que en algunos casos, hicieron uso de las policías municipales o estatales, para reprimir a quienes no estaban conformes con las formas en que se llevaban a cabo estas elecciones.
Lo que sucedió no puede ser la mejor muestra democrática para querer desaparecer al Instituto Nacional Electoral, porque quedó evidenciado que en MORENA no quieren reglas, ni árbitros imparciales, lo que quieren es imponerse con la fuerza que les da el poder de estar en el gobierno
Morena no tuvo enemigos fuera de lo que es el partido, tiene en las entrañas al enemigo y ese enemigo es la gran cantidad de políticos corruptos y convenencieros, que llegaron de otros partidos para abusar del poder que les da el ser gobierno.
Si los que toman decisiones en MORENA no consideran vergonzosa la experiencia del pasado fin de semana, el partido estará condenado a desaparecer, más pronto de como le sucedió al Partido de la Revolución Democrática, al que se lo acabaron sus propias “tribus”.
Una situación como la sucedida debería poner al líder nacional, Mario Delgado, en condiciones de ser relevado, de la misma manera la secretaría general, pero en la actual convocatoria están al margen de ser sometidos a votación nacional, o sea todos los cargos se pueden elegir menos esos.
Hay vicios políticos al interior de MORENA que ya son una carga, por lo que quien decide podría ser el propio verdugo, de un partido que ahora tiene todo el poder.
